Un beso es todo un mensaje, lleno de símbolos. Puede ser la antesala de un amor para siempre o el final de un romance que parecía prometedor. Los besos, como cualquier aproximación al espacio íntimo de otra persona tienen un significado particular de acuerdo al llamado lenguaje gestual.
El significado de los besos
El beso en la mejilla: suele darse entre familiares, amigos, compañeros de trabajo o conocidos. En América Latina es el saludo más común, inclusive entre los varones. No suele revestir un contenido erótico aunque eso bien puede depender de la postura de los labios y la proximidad a la boca de la otra persona.
El beso en la mano: es un símbolo de respeto. El hecho de que este beso se dé debajo del área del pecho habla de cierta desigualdad entre los participantes de la acción. Quien besa suele detentar cierto poder por sobre quien recibe el beso.
El beso en la frente: habla de protección, de cuidado, de brindar cobijo; es una acción casi paternal, una muestra de afecto entrañable. Rara vez este tipo de contacto entraña connotaciones eróticas.
El beso de lengua jamás da lugar a interpretaciones tibias. Es claramente sensual, la antesala del sexo. Suele activar la dopamina de los participantes de la acción llegando, incluso, a provocar sensaciones comparables a las de una adicción.
El beso en el cuello: es una luz verde a la intimidad. La zona del cuello, al igual que los lóbulos de las orejas es una zona de gran sensibilidad.
El beso en la oreja: es peligrosamente hot, más aún si viene acompañado de una pequeña mordida o de un susurro. Seguramente no medie mucho tiempo hasta la interacción sexual.
De acuerdo al Kamasutra, existen decenas de clases de besos que propician distintos grados de intimidad sexual. Besar es un arte y conocer el significado de cada beso es importante a la hora de la conquista.