En verano las salsas y vinagretas cobran protagonismo para aportar sabor, aroma y frescor a tus platos más ligeros, entre ellos, las imprescindibles ensaladas. ¡Ficha nuestras sugerencias!
Junto al clásico aliño de aceite y vinagre para las ensaladas, existen otras muchas posibilidades para aderezar los platos más apetecibles en la época estival. La base de una buena vinagreta consiste en conseguir una proporción correcta entre el aceite y el vinagre (normalmente el doble de aceite) y acertar con ese ingrediente “secreto” que le dé un toque diferente capaz de potenciar el sabor de los distintos alimentos que forman el plato.
A la hora de hacer tus salsas veraniegas, ten en cuenta que para sacar el máximo partido a una vinagreta no sólo es importante equilibrar los ingredientes sino mezclarlos de forma adecuada. Utiliza tenedor o varillas para obtener una mínima emulsión que dé a la salsa la consistencia necesaria. Otra sencilla y práctica opción es agitar las vinagretas en una botella con tapa, que además te servirá para su posterior conservación en la nevera.
Un clásico ideal no sólo para ensaladas verdes, sino también para las de patata o para acompañar pescados al vapor.
Mezcla bien todos los ingredientes, mejor con varilla y vierte el aliño sobre tu plato favorito.
Perfecta para aliñar platos de pasta fría, menestras y ensaladas.
Mezcla el aceite con el vinagre y añade la cebolleta picada en trozos menudos junto al orégano, la pimienta y la sal. Corta el queso en taquitos e incorpora. Deja macerar unos minutos en la nevera y adereza tu plato de pasta o tu deliciosa ensalada.
Mezcla bien todos los ingredientes, mejor con varilla y vierte el aliño sobre tu plato favorito.
Perfecta para aliñar platos de pasta fría, menestras y ensaladas.
Mezcla el aceite con el vinagre y añade la cebolleta picada en trozos menudos junto al orégano, la pimienta y la sal. Corta el queso en taquitos e incorpora. Deja macerar unos minutos en la nevera y adereza tu plato de pasta o tu deliciosa ensalada.
Muy sencilla, es el aliño perfecto para preparar unos mejillones, un pulpo a la vinagreta o unos palitos de cangrejo con un toque diferente (todos estupendos como aperitivos de verano).
Corta la cebolleta y los pimientos en trozos pequeños y añádelos a la mezcla de aceite y vinagre. Vierte la vinagreta sobre tu plato preparado (mejillones, cangrejo, salpicón) y reserva al menos una hora en nevera para que los ingredientes tomen bien el sabor.
Junto al clásico aliño de aceite y vinagre para las ensaladas, existen otras muchas posibilidades para aderezar los platos más apetecibles en la época estival. La base de una buena vinagreta consiste en conseguir una proporción correcta entre el aceite y el vinagre (normalmente el doble de aceite) y acertar con ese ingrediente “secreto” que le dé un toque diferente capaz de potenciar el sabor de los distintos alimentos que forman el plato.
A la hora de hacer tus salsas veraniegas, ten en cuenta que para sacar el máximo partido a una vinagreta no sólo es importante equilibrar los ingredientes sino mezclarlos de forma adecuada. Utiliza tenedor o varillas para obtener una mínima emulsión que dé a la salsa la consistencia necesaria. Otra sencilla y práctica opción es agitar las vinagretas en una botella con tapa, que además te servirá para su posterior conservación en la nevera.
Un clásico ideal no sólo para ensaladas verdes, sino también para las de patata o para acompañar pescados al vapor.
Mezcla bien todos los ingredientes, mejor con varilla y vierte el aliño sobre tu plato favorito.
Perfecta para aliñar platos de pasta fría, menestras y ensaladas.
Mezcla el aceite con el vinagre y añade la cebolleta picada en trozos menudos junto al orégano, la pimienta y la sal. Corta el queso en taquitos e incorpora. Deja macerar unos minutos en la nevera y adereza tu plato de pasta o tu deliciosa ensalada.
Muy sencilla, es el aliño perfecto para preparar unos mejillones, un pulpo a la vinagreta o unos palitos de cangrejo con un toque diferente (todos estupendos como aperitivos de verano).
Corta la cebolleta y los pimientos en trozos pequeños y añádelos a la mezcla de aceite y vinagre. Vierte la vinagreta sobre tu plato preparado (mejillones, cangrejo, salpicón) y reserva al menos una hora en nevera para que los ingredientes tomen bien el sabor.
Deliciosa y original por ese toque agridulce que consigue el contraste entre el vinagre y la mermelada.
Mezcla bien todos los ingredientes y vierte sobre tu ensalada. Esta vinagreta va muy bien con ensaladas que incorporen frutos secos (nueces, almendras, avellanas).
Sabor intenso, ideal si buscas emociones fuertes en la cocina o quieres “alegrar” una ensalada verde.
Trocea las alcaparras y las anchoas e incorpóralas a la mezcla de aceite y vinagre.
Sabor mediterráneo con aromas griegos. ¡Te encantará!
Mezcla los yogures con el zumo de limón y el aceite hasta conseguir una ligera emulsión. Bate con varilla la nata líquida hasta que quede montada (sin demasiado cuerpo) e incorpórala a la mezcla. Continúa batiendo hasta conseguir una crema muy ligera. Espolvorea con el cebollino y para un toque oriental, añade, si lo deseas, los cominos.
Esta salsa es válida para ensaladas verdes y también para ensaladas de arroz. Puedes utilizarla, además, como acompañamiento a pescados asados o aderezo de patatas hervidas.
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