Una buena taza de café es, sin lugar a dudas, uno de los grandes placeres que existen. Hay quién lo necesita para activarse cada mañana y quién lo consume durante todo el día o toda su jornada laboral. Esto lo convierte en un producto extensamente comercializado en todo el mundo.

¿Qué es el café orgánico?

El café orgánico se diferencia del café convencional en su modo de cultivo y producción. En el caso del café orgánico, los fertilizantes que se usan son orgánicos, como por ejemplo la pulpa de café o el estiércol de gallina. La mayoría del café orgánico se cultiva de modo tradicional: en plantaciones sombreadas entre bosques frondosos. Esto facilita que las aves que habitan en estos árboles cumplan la función de proteger de insectos a la planta del café. Así se evita el uso de insecticidas y otros productos químicos, y se mantiene vivo el ecosistema de la zona. Otra gran ventaja de este tipo de cultivo es que el bosque protege las plantaciones, de manera que estas resisten mejor los cambios repentinos de clima, propios del cambio climático.

Formatos del café orgánico

El café orgánico puede encontrarse en grano, molido pero también en un café en cápsulas. Por ejemplo, las cápsulas Tierra. Bio Organic son una manera excelente de obtener todas las ventajas del café orgánico desde tu cafetera de cápsulas.

Los beneficios de tomar café

Un consumo moderado de café aporta a nuestro organismo más ventajas que inconvenientes. Pero, ¿Qué es un consumo moderado? Se considera que son unas 2 o 3 tazas de café expreso -o 10 tazas si se utiliza una máquina de filtro- al día. Esto representa entre 400 mg y 500 mg de café diarios.

• Reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
• Combate la depresión.
• Reduce el riesgo de padecer cáncer.
• Protege el hígado.
• Reduce el riesgo de padecer alzhéimer.
• Protege de la diabetes tipo 2.
• Disminuye la mortalidad en general.