Los licenciados en nutrición educamos a la comunidad para que aprendan a sostener una alimentación variada y completa, con el adecuado aporte de macro y micronutrientes, que nos asegure cubrir todos los requerimientos. Conectar con el hambre real y poder mejorar las elecciones alimentarias es el primer paso para sostener hábitos saludables. El entorno sociocultural, la publicidad, las emociones, entre otros factores, juegan un rol clave en la formación de hábitos. La avalancha de información a la que se accede hoy en día gracias a las redes sociales, puede desinformar o generar confusión respecto al conocimiento que se tiene sobre los determinados alimentos, suplementos y dietas. Pudiéndose exagerar las virtudes de algunos de estos. Nunca el beneficio aportado por un solo alimento puede superar el aportado por un patrón alimentario saludable. No existen las dietas milagro en la ciencia de nutrición. Por eso, en esta nota desterramos los mitos y creencias infundadas más comunes sobre nutrición:

– Un suplemento proteico es mejor que una comida. FALSO

Un suplemento nunca va a sustituir los beneficios de una comida bien elaborada. El suplemento puede ser necesario para personas que entrenan en deportes de elite y no llegan a cubrir sus requerimientos nutricionales. Pero siempre es importante tener una alimentación equilibrada. Y no generan excesos tanto con el consumo de suplementos como con la alimentación.

– El pan engorda. FALSO

Es importante controlar la cantidad de pan ingerida, como la de cualquier otro alimento. El pan es rico en hidratos de carbono, que aporta gran fuente de energía para las actividades diarias. Si es un pan integral y con semillas, con poco procesamiento, escasa cantidad de harina refinada será de mejor calidad. Te hará subir solo si sobrepasa las necesidades diarias o si lo untás con bastante dulce. Si regulás las porciones, no es necesario eliminarlo de la dieta.

– Las dietas détox adelgazan. FALSO

No, no solo no adelgazan. Sino que promueven hábitos alimentarios poco sostenibles en el tiempo por lo que desencadenan efecto rebote en el peso.

– Tomar agua en las comidas engorda. FALSO

El agua no tiene calorías. Por lo tanto, no te hará subir de peso si se toma antes, durante o después de las comidas. Es importante cuidar la ingesta de líquidos azucarados: bebidas gaseosas tradicionales, jugo de fruta, pulpas de fruta, entre otros. El consumo de estos sí puede sumar calorías adicionales en la alimentación.

– Los alimentos light adelgazan. FALSO

Es importante entender el concepto de alimento light: reducido en alrededor de un 30 % de calorías de la versión original. Están indicados para personas que por una patología los requerían, diabetes o hipertensión arterial o si se desea generar una pérdida de peso. Siempre consumiéndose en forma controlada, pero no adelgazan por sí solos. Depende de que las comidas se planifiquen adecuadamente y se acompañe con otros hábitos como el ejercicio físico, el descanso adecuado y el control de estrés.

 – La fruta engorda. FALSO

Debemos mantener una ingesta de tres porciones de frutas al día, ningún alimento por si solo engorda.

– El agua con limón adelgaza. FALSO

Contribuye a la hidratación y favorece la diuresis. Pero no puede por si solo adelgazar. Va a depender de otros hábitos como explicamos anteriormente.