Combatí el insomnio en el embarazo


Qué lo puede causar y cómo solucionarlo


Causas habituales del insomnio en el embarazo

Náuseas y vómitos durante el embarazo: suelen producirse, sobre todo, en el primer trimestre de embarazo y cuando se dan por la noche pueden alterar el sueño notablemente.

Reflujo gastroesofágico: la digestión de las embarazadas se complica por los cambios hormonales y por el poco espacio que hay en el embarazo, sobre todo en las últimas etapas del mismo. Afecta a más de un 50% de las embarazadas y el principal síntoma es una sensación de ardor o acidez en la zona del pecho y de la garganta. Aparte de esto, también puede producir la regurgitación de alimentos o del jugo gástrico. Esto puede producir mucho malestar y complicar el sueño.

Movimientos fetales: cuando los movimientos del bebé son molestos, especialmente en la zona de las costillas, y se producen por la noche, pueden afectar a la calidad del sueño de la embarazada. Estos suelen ser más frecuentes en el tercer trimestre pero, afortunadamente, se producen mucho más durante el día.

Dolor de espalda o molestias musculares: se producen por el aumento de volumen uterino, que provoca que el cuerpo adapte la curvatura de la columna para buscar el equilibrio. Suele producirse más en las últimas semanas antes del parto por el peso del bebé y esto tiene como consecuencia, que debido a los dolores o pinchazos, las embarazadas no puedan dormir bien o no encuentren una postura agradable.

Aumento de la frecuencia urinaria: durante el embarazo se orina con mucha más frecuencia tanto por el día como por la noche. Esto es así por el aumento de líquidos de la embarazada y el volumen del útero, que presiona la vejiga. Debido a esto último, la necesidad de orinar suele aumentar en los últimos meses, cuando el tamaño del bebé es mayor. Esta puede ser una de las causas del insomnio cuando la mujer se levanta a hacer pis y luego tiene dificultades para volver a conciliar el sueño.

Ronquidos relacionados con el embarazo: la calidad de la respiración empeora durante el embarazo por los cambios de la mucosa en las vías respiratorias debido a un aumento de la secreción y también de la cantidad de flujo sanguíneo, lo cual puede causar ronquidos. Eso sí, es importante que consultes al médico si existen otros problemas como la diabetes o la hipertensión.

Síndrome de piernas inquietas: se trata de una sensación molesta de hormigueo o quemazón en las piernas que no permite dejarlas quietas cuando se está en reposo. El único remedio para dejar de sentir es moverlas, por lo que las embarazadas afectadas por este síndrome tiene grandes complicaciones para conciliar el sueño.

Consejos para conciliar el sueño durante el embarazo

Aunque las causas del insomnio durante el embarazo son variadas y cada embarazada es un mundo, existen unas pautas generales que pueden ser útiles para mejorar el sueño.

• No te acuestes directamente después de comer.
• Procura que tus cenas sean ligeras y evita los alimentos grasos o ácidos.
• Limita las recetas o alimentos muy condimentados.
• Aposta por la ropa cómoda y holgada.
• Es importante mantenerte hidratada, pero no tomes tanto por la noche para reducir la necesidad de orinar.
• Colocate con el tronco un poco elevado para dormir.
• Hace ejercicio físico, moderado y adaptado al embarazo, durante el día para favorecer el descanso. Eso sí, evita hacerlo a última hora del día para que el organismo no se active.
• Evita la exposición a pantallas luminosas a última hora de la tarde.
• Mantene horarios de sueño regulares, procurando acostarte y levantarte a la misma hora.
• Procura que el ambiente de la zona en la que duermas sea adecuado para el descanso y promueva la relajación: buena temperatura, ausencia de ruidos, orden, entre otros.
• Proba la almohada para el embarazo que se adapta a tu cuerpo y puede ser útil para conseguir una postura más confortable.

Recorda que no se recomienda tomar medicamentos para el insomnio durante el embarazo, para evitar cualquier riesgo perjudicial para la madre y el bebé. Esto es así porque algunos pueden tener efectos secundarios o no existen estudios suficientes que garanticen la seguridad de estos fármacos durante la gestación.

Sea como sea, aunque apliques los consejos generales que son inocuos durante el embarazo, nuestra recomendación es que no dudes en comentarle a tu médico que tenes problemas para dormir. Al conocer de forma individual el trastorno el sueño que sufrís y tu estilo de vida, va a poder ofrecerte recomendaciones más personalizadas, sobre todo si la situación no mejora.

Suscríbete para acceso total!

Disfruta de acceso ilimitado a más de 100 notas sobre belleza, horóscopo, moda y tendencias!

Verificando suscripciónError al verificar, intente de nuevo

Por favor verifique su suscripción

54