Compra carbones en una tienda esotérica o santería. Puedes conseguir también una mezcla para agregar, por ejemplo benjui, incienso y mirra para hacer más potente éste ritual sagrado.

Prepara la mezcla de los tres ingredientes y colócala en un recipiente.

Transforma por unos momentos tu hogar en un pequeño templo. Enciende una vela blanca en el lugar en el que más tiempo pasas en tu casa ya que este color es símbolo de protección. Haz una oración y pide asistencia a tus guías, maestros y ángeles. Invita especialmente a participar de éste ritual al Arcángel Miguel para que intervenga activamente en esta limpieza.
Ubica al carbón en un incensario. (recipiente para inciensos)
Enciende el carbón con un fósforo. Agrega una cucharadita pequeña de la mezcla (mirra, incienso y benjuí) al incensario.

Recorre tu casa de izquierda a derecha ahumando todos los ambientes, incluso los rincones. Abre luego todas las puertas y ventanas para que circule la energía.
Coloca flores frescas en un florero, aquellas que más te gusten.

Luego date un baño confortable. Mientras lo haces cierra los ojos, respira profundamente y visualiza tu casa limpia energética y espiritualmente. Imagina que una luz blanca y brillante invade todo el espacio, cada uno de los rincones de tu hogar. Observa cómo se expande esa luz hasta llegar a tí, iluminandote también.
Pide especialmente al Arcángel Miguel que proteja tu hogar de las malas vibraciones y que sea Él el guardián de sus puertas, impidiendo el ingreso del mal en todas sus formas y manifestaciones, a partir de éste momento..
Agradece su presencia y la de tus guías y cierra con una plegaria el ritual con la palabra AMÉN.
Vuelve a tu rutina diaria.