No estoy segura de sí puedo confiar en ti
Los Tauro son las personas más fiables del mundo. Si no confías en ellos, puede que piensen que algo no va bien contigo.
Eres demasiado empalagosa
Fieles a su familia y amigos, a todos los Tauro les encanta demostrar su amor… ¡y recibir todo este amor de vuelta! ¿Es mucho pedir?
Creo que le das demasiado a los demás
¡No pueden evitar ser generosos! Decirle esto a un Tauro es como pedirle un imposible, ya que si hay algo que les gusta eso es ayudar a los demás.
Tienes la habitación hecha un desastre
Si no compartes dormitorio con un Tauro es mejor que no opines sobre su particular forma de mantener las cosas ordenadas. En caso contrario, ¡que la fuerza te acompañe!
Deja de ser tan perezosa
¿Estás intentando, por casualidad, llamar perezoso a un Tauro? Ni te molestes. Están demasiado ocupados viendo alguna serie en el sofá para levantarse y discutir contigo.
Eres una mimada
Los Tauro pueden ser un poco obstinados y querer las cosas de una forma concreta, y como están acostumbrados a salirse con la suya, no contemplan que las cosas no salgan como ellos quieren. Pero nunca le digas que es una niña mimada y consentida.
Siempre te tienes que salir con la tuya
Un Tauro siempre quiere todo de una manera determinada: son tercos y perfeccionistas. Cambiar esta característica simplemente no es una opción.
¿Puedes dejarlo ya?
Renunciar no existe en el vocabulario de los Tauro: cabezones y persistentes, llegarán hasta el final, ¡incluso si tienen que hacerlo solos!
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