El serbio remontó un partido casi imposible ante Tsitsipas y se quedó con el título en Roland Garros. El número del mundo llegó a los diecinueve Grand Slams en su carrera.

Histórico lo sucedido y vivido este fin de semana en el Bois de Boulogne, donde Novak Djokvic gritó campeón de Roland Garros por segunda vez en su carrera. El serbio se impuso en una final épica a Stefanos Tsitsipas, quinto cabeza de serie, por 6-7 (6), 2-6, 6-3, 6-2 y 6-4 y, tras cuatro horas y once minutos de juego, se coronó campeón de un evento de Grand Slam por decimonovena vez.

Sin embargo, no todo fue color de rosas para Nole, quien comenzó bastante errático el encuentro. Tsitsipas jugó un tenis brillante durante los dos primeros sets y ellos afirmó porqué es el número uno de la carrera a Turín. El Rayo griego ganó esos dos primeros parciales por 7-6 (6) y 6-2 y quedó a tan solo un set de la consagración y la gloria.

No obstante, allí apareció la mejor versión de Djokovic, quien con un tenis espléndido emprendió la remontada y supo hacerse con los mejores momentos del match para inclinar la cancha a su favor.

Poco a poco, game a game, la figura de Djokovic crecía y la del Rayo griego se desinflaba, producto del cansancio y, tal vez, por qué no, del miedo escénico que provoca estar en esa situación ante uno de los mejores de la historia.

Así, Djokovic se quedó con el tercer y cuarto parcial por 6-3 y 6-2 y forzó el quinto, donde todo parecía finalizar prontamente para el serbio. Tsitsipas, con el orgullo en alza, no dejó que ello pasara y comenzó a jugar nuevamente con un nivel similar al de los dos primeros sets, lo que hizo de esa manga un espectáculo digno de campeones.

Puntos increíbles se dieron durante todo el parcial y cuando pareció que todo se definía con el quiebre a favor de Nole en el tercer juego, volvió a comenzar tras la levantada casi épica de dos puntos de quiebe que solventó Tsitsipas en el séptimo juego.

Llegaron así al décimo, donde Nole dispuso de un match point levantado por el griego, pero en el segundo, con una volea de drive cruzada, finiquitó el asunto y se llevó el partido, para así, coronarse por decimonovena vez en un Grand Slam y por segunda vez en el Bois de Boulogne.

De esta manera, Nole demostró, tras cuatro horas y once minutos, que es uno de los más grandes de la historia, y quedó a tan solo un Major de alcanzarlos a Roger Federer y a Rafael Nadal en la cantidad de eventos de esta categoría.

Cabe mencionar que Djokovic es el segundo jugador en la historia en levantar una final en Roland Garros luego de ir perdiendo 2-0 en sets. El primero en lograrlo había sido el argentino Gastón Gaudio, en el 2004, cuando venció a Guillermo Coria en la definición por 0-6, 3-6, 6-4, 6-1 y 8-6.