Poses para probar

Contra la pared

Él está de pie con los pies firmemente apoyados en el suelo. Ella se pone de espaldas a él, apoyada contra la pared y se deja levantar ligeramente. Ella lo debe rodear con las piernas y apoyar los pies en la cama o el sofá. Ahora él puede jugar con la posición de ella. Los movimientos deberían ser de arriba a abajo, rápidos y profundos.

El cóctel

Ambos se colocan de pie, uno frente al otro. Se abrazan y ella mete doblada una de sus piernas entre las piernas de él. Él agarra el trasero de su pareja y ella se engancha a la espalda de él. Los movimientos deben ser lentos y rítmico. Uno de los puntos fuertes de esta postura es que te vas a sentir muy cerca de tu pareja.

El encuentro en las escaleras

En unas escaleras la mujer se pone de rodillas en un escalón y de espaldas al hombre, que se pone de pie atrás de ella, mientras los dos miran hacia arriba de las escaleras. Ella se apoya en el escalón de arriba y él agarra sus caderas y la penetra desde atrás.

El pequeño puente

En esta postura es necesario que el hombre tenga gran flexibilidad y sea capaz de hacer la posición del puente durante, así como aguantar el tiempo suficiente como para realizar la postura. Una vez conseguido este paso, lo siguiente es que su pareja se coloque encima para que se produzca la penetración. Los movimientos, que dependen de ella, tienen que ser rítmicos y profundos.

El reto

Ella se coloca en posición de sentadilla sobre un una silla de espaldas a él, que se coloca de pie y agarra a su pareja por las caderas mientras la penetra. Es importante que los movimientos permitan mantener el equilibrio.

La liana

Esta postura del Kamasutra es muy similar a la posición contra la pared, con la única diferencia de que en este caso ella no se apoya en nada. En este caso ambos tienen que generar movimientos equilibrados para poder mantener la posición.

El antílope

Él se coloca de pie y agarra a su pareja mientras la penetra. Ella lo rodea con las piernas para que la unión sea más firme. Si es necesario, pueden apoyarse contra una pared para que la libertad de movimientos sea mayor y el peso menor.

El acto de retorno

Para realizar esta postura, el hombre se colocará de pies y ella de espaldas a él inclinada. Para que sea más cómoda, se apoyará en un banco o silla que proporcionará estabilidad y mayor inclinación para que la penetración sea profunda.