Muchas de las personas que acuden a un psicólogo online lo hacen después haber sufrido un desengaño amoroso que les ha desestabilizado lo suficiente como para no poder continuar con una vida plena y feliz.
Aunque no siempre, un desengaño puede dar lugar a la ruptura de la pareja, por lo que, además de ser necesario superar esa desilusión, será necesario también superar una ruptura.
Después del desengaño o de la ruptura hay muchas personas que creen que no podrán volverse a enamorar. Es cierto que suele ser necesario un tiempo para estabilizar los sentimientos, asumir la nueva situación y terminar con la rabia que el desengaño ha producido. Una vez que la persona es capaz de perdonar, habrá superado la ruptura de pareja y puede volver a abrirse paso el amor.
Aunque la mayoría de la gente puede afirmar que sí ha sufrido un desengaño amoroso, resulta complicado explicar en qué consiste realmente. Entender qué es y qué sentimientos puede producir, en un primer momento no va a eliminar el dolor, pero puede ser una de las claves para salir fortalecidos de la experiencia.
Un desengaño amoroso se da porque las expectativas, deseos y/o creencias que se tienen para con la relación y con el otro no se corresponden con la realidad y, llegado un momento, la realidad se impone. A pesar de que cada relación de pareja tiene unas características muy diferentes y el desengaño pueda variar en cada caso, podemos encontrar una serie de razones que se repiten con más frecuencia, entre ellas:
Una vez que sucede el desengaño, es necesario pasar por un periodo de adaptación a la situación. Asumir la nueva realidad y encontrar la forma de vivir con ello no es una tarea sencilla, ya que la propia decepción ya causa dolor, pero en muchas ocasiones aparecen asociados sentimientos negativos como culpa, vergüenza o agobio.
Estos sentimientos negativos hacia uno mismo pueden dificultar la superación del desengaño, por eso es necesario analizar la situación y no asumir una culpa que no corresponde. Reconocer los fallos propios puede ayudar a entender lo sucedido y a no cometerlos en un futuro, pero aferrarse a esos errores frenará el afrontamiento de la nueva situación personal.
Date el tiempo necesario
El desengaño duele. Como cualquier otra decepción, asumirlo conlleva tiempo, confiar en que los sentimientos negativos que ahora sientes son algo pasajero será clave en la recuperación emocional. Querer superarlo demasiado rápido puede generarte frustración y producir el efecto contrario. Es necesario entrenar la paciencia y repetirse que todo lleva su tiempo.
Olvida la culpa
Como hemos dicho, hay que desterrar los sentimientos de culpa y de inferioridad que puedan existir. Ten en cuenta que la causa de la culpa no es lo que hacemos sino la forma en la que valoramos una situación. De esta manera puedes estar sintiéndote culpable por algo que no te está en tu mano y cuando esto ocurre se pone en peligro también la autoestima.
Desahógate
Expresar los sentimientos y hablar sobre ellos hace que se comprendan mejor y se asuman de una forma más eficaz. Esto permite que las emociones se analicen, se ordenen y aparezca una importante sensación de desahogo.
Apóyate en los tuyos
Si en algún momento de tu vida puedes necesitar de tus amigos y familia, es en un momento como este. Además de hacer que te encuentres mejor por el simple hecho de compartirlo, puede que esa comunicación cree un vínculo más fuerte entre vosotros. ¡Mucho ojo! Evita apoyarte en aquellas personas que te hacen sentir juzgado, las que alimentan los sentimientos de culpa o las que hacen que no te sientas escuchado.
Evita que la vida gire en torno a esto
Si el desengaño ha desencadenado la ruptura, es inevitable no buscar información sobre su vida o necesitar saber cómo le va sin ti. Pero, en la medida en que consigas no hacerlo, y seas capaz de centrarte en cosas que impliquen cuidado de ti mismo, estarás caminando hacia la superación. Una buena idea es retomar o empezar actividades que te gusten.
Evita comparaciones
Tanto si ha sido por una infidelidad como si la otra persona ha rehecho su vida antes, compararte con la persona que ocupa tu lugar anterior, es de las peores cosas que puedes hacer. Es necesario que entiendas que cada persona es diferente y que al compararte estás poniendo tu autoestima en juego, ya que probablemente en esa comparación estés siendo injusta contigo.
En cuanto sea posible, perdona
A pesar de que hayas decidido no continuar con la relación es necesario que perdones el engaño. Ese perdón es el que te va a ayudar a comprender lo sucedido y es un paso necesario para empezar nuevas relaciones siendo capaz de confiar en la otra persona. No olvides que perdonar no significa retomar la relación sino acabar con los sentimientos negativos hacia esa persona.
Busca ayuda
Si la situación se te hace muy cuesta arriba y te resulta complicado llevar a la práctica estos consejos, busca la ayuda de un profesional que te ayude a encontrar el camino para superarlo y te enseñe las estrategias adecuadas.
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