Los antiguos egipcios ya utilizaban métodos anticonceptivos para evitar embarazos indeseados, se ponían telas y también partes de animales como el intestino del cerdo. Si damos un salto en el tiempo, en 1920 se inventó el primer preservativo de látex, y desde entonces su diseño apenas ha cambiado a pesar de los avances tecnológicos.
En Europa y seguro que en tu entorno, el preservativo es un método anticonceptivo muy arraigado, pero a nivel mundial tan solo un 5% de los hombres utiliza condón. Aunque puede variar, ya que las diferencias entre unos países y otros son grandes, este porcentaje es una media. Esto se debe al difícil acceso a ellos en algunas partes del mundo.
No hay nada cien por cien seguro, pero el preservativo tiene los índices más altos de efectividad en lo que a métodos anticonceptivos y contra la transmisión de enfermedades se refiere. Tiene un 97% de efectividad a la hora de evitar posibles embarazos no deseados y un 95% para impedir el contagio de una ETS.
No hay ningún impedimento, tanto médico como científico, que impida el uso del preservativo. Las personas con alergia al látex también pueden utilizarlos, ya que hay condones hechos de otros materiales para aquellos que tengan este problema. Los expertos recomiendan el uso de este anticonceptivo a pesar de que el grado de confianza en la pareja sea alto.
Se trata de un producto muy resistente, hasta tal punto que una diseñadora brasileña se animó a confeccionar ropa con ellos. En cuanto a su capacidad, los condones pueden llegar a contener hasta 4 litros en su interior sin romperse. Resisten todas y cada una de las posturas del kamasutra, ¿las has probado ya?
El condón es un método anticonceptivo masculino por lo que podemos pensar que la diferencia entre los hombres y mujeres que lo compran es grande. Pues bien, a pesar de que la mayoría de consumidores de este producto sean hombres, el 40% de sus ventas es por parte de mujeres. Lo cual es significativo ya que si él no tiene, seguramente ella sí.
Esto es absolutamente falso, a pesar de lo que la lógica nos pueda decir. El utilizar dos preservativos causará fricción entre ellos lo que aumenta las posibilidades de romperse, y por tanto no cumplirán su función. Hay que utilizar siempre un único preservativo, y siempre teniendo precaución de no romperlo al abrirlo y/o al colocarlo.
Debido a su resistencia, los soldados lo utilizan para proteger sus armas de la arena y para guardar agua. En muchos casos también se utilizaban como guantes quirúrgicos y para detener hemorragias.
Se ha demostrado que este es el único material capaz de impedir el traspaso del VIH de una persona a otra. Es el arma más efectiva que hay en la actualidad para impedir el contagio de enfermedades de transmisión sexual. ¡Siempre hay que mantener relaciones seguras!
Los preservativos normales tienen una anchura de 55 mm de media, aunque varía dependiendo de la marca. Sin embargo los preservativos XL apenas tienen diferencia, el ancho varía hasta 57 mm lo que no resulta muy significativo. ¿Conoces algún fanfarrón que dice que utiliza preservativos XL? Como ves, ¡no es para tanto!
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