Basta de romantizar relaciones tormentosas y tóxicas.
Durante años hemos creído que hay mérito dentro del sufrimiento en el amor y que para ser felices hay que padecer muchas cosas o resignarse, algo que no deberíamos normalizar y que lo prueban algunas películas de Netflix.
Las relaciones perfectas no existen, ni siquiera dentro de la ficción, pero también es errado creer que solo merecemos noviazgos o matrimonios turbulentos, llenos de conductas tóxicas y que sobrepasan los límites de nuestro amor propio.
Aunque no está exenta de los dramas propios de la juventud, no hay que quitarle mérito a cómo Lara Jean y su interés romántico, Peter Kavinsky, luchan el uno por el otro.
Todo inicia cuando las cartas secretas que ella ha escrito a sus enamorados llegan misteriosamente a manos de sus destinatarios y su vida se volverá un divertido caos.
Las relaciones amorosas no deberían hacernos sufrir, sino encontrar en ellas el apoyo necesario para atrevesar las dificultades y hasta el impulso para alcanzar la vida que soñamos.
Eso nos enseñan Violet y Finch, dos adolescentes que se encontraron batallando con grandes desafíos personales y crean un lazo irrompible durante un viaje liberador a Indiana.
Esta comedia es una de las películas románticas más imperdibles de Netflix porque mezcla una historia original, el humor y los momentos íntimos con la correcta proporción.
Veremos a dos asistentes que intentan enamorar a sus jefes para tener vacaciones, ya que tienen exceso de trabajo y son mal pagados. Sin embargo, su plan no saldrá muy bien pues todo se complica cuando afloran los sentimientos.
Esta cinta demuestra que todas las relaciones comienzan con ciertos tropiezos o problemas, pero cuando el amor es más grande que esas diferencias, lucharán para tener una relación estable y sana juntos.
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