Seguramente tu médico te va a dar las recomendaciones oportunas para que cuides tu cicatriz post cesárea. Además de esas recomendaciones, no dejes de seguir estos consejos para que tu herida cure rápido y perfectamente.
Mantener la herida limpia
La higiene diaria es fundamental para evitar que la herida se infecte y se perjudique su recuperación. Cada día, debes limpiar la herida con agua templada y con un jabón neutro. Recordá secar muy bien la herida, usa una toalla limpia y seca la piel a pequeños toques, sin aplicar demasiada presión. Deja la herida al aire libre unos minutos y coloca una gasa aséptica antes de vestirte.
Hidratación
A medida que la herida se vaya secando, vas a notar como empieza a picarte. Debes evitar rascarte a toda costa, o te va a quedar una cicatriz difícil de disimular. Para evitar los picores, debes mantener la piel muy bien hidratada, tanto externa como internamente. Usa cremas muy untuosas, a base de aceite a ser posible ya que son mucho más hidratantes. También debes tomar mucho agua cada día para que tu cuerpo se mantenga bien hidratado desde el interior.
Evita hacer sobreesfuerzos
Tené mucho cuidado a la hora de realizar ciertos movimientos, especialmente aquellos en los que intervenga la zona afectada. Al agacharte para agarrar a tu bebé, procura doblar las rodillas y tener mucho cuidado con tu cicatriz. Acudí al médico si la herida comienza a sangrar o si ves que cambia su aspecto.
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