Volver a la rutina


Como volver al gym sin morir en el intento


Muchas veces, uno pierde el hilo de la actividad física. Sea por la razón que sea, trabajo, estudios o familia, uno tiende a dejar de lado esa parte de la rutina diaria cuando se encuentra rodeado de responsabilidades que le demandan muchísimo tiempo. Este es un grave error, ya que no solo el ejercicio es esencial para salud, sino que además retomarlo suele ser tremendo.

Pero no hay que preocuparse, existen muchas maneras en la que uno puede encarar nuevamente una rutina física sin sentirse totalmente desgastado y desanimado. Se sabe que es difícil meterse de nuevo en el gimnasio y dedicar cada día un rato a practicar deporte pero, no solo es imprescindible para el organismo, sino que además hay que hacerlo correctamente para evitar lesiones.

Paso a paso

La forma física luego de dejar por un tiempo no es la misma que antes. Por eso, no se puede empezar con la misma rutina que se hacía antes. La actividad se debe reiniciar con una intensidad moderada, y se debe ir aumentando con el paso del tiempo. De esta manera, los músculos se irán acostumbrando, sin lesiones, al ritmo que teníamos. Se debe empezar con ejercicios fáciles, tres o cuatro veces por semana. Por sobre todo, no hay que agobiarse. Aunque al principio cueste, con esfuerzo y hábitos saludables, en unas semanas se volverá a estar en forma.

Motivación

No hay nada mejor que hacer algo que nos gusta y sostener esa rutina con el tiempo. Lo mismo pasa con la actividad física. Uno debe elegir la actividad que más lo entretenga y apasione para que los ejercicios no se vuelvan aburridos. Andar en bicicleta, ir a clases de zumba o salir a correr. Hay miles de alternativas, que simplemente uno tiene que encontrar la suya. No hay que olvidarse de escuchar al cuerpo. Si uno está cansado, dolorido o con dolor de cabeza constante, hay que reducir el rendimiento.

Calentar y estirar

Antes de realizar cualquier actividad física es importante calentar los músculos, en especial después de un tiempo sin hacer ningún tipo de deporte. Previo hay que estirar los músculos y preparar el cuerpo para el esfuerzo al que se va a someter. Hay que dedicarle unos 10 minutos al calentamiento y otros 10 al estiramiento, ya que estirar es igual de importante que calentar. Una vez que se termina la rutina, es esencial volver a elongar los músculos para relajar y que no duela nada.

Hidratación

Siempre que el cuerpo quema grasas necesita estar bien hidratado, y más cuando ahora que se están acercando las temperaturas altas. Una buena hidratación ayuda a evitar lesiones y a reponer las sales que se pierden durante el entrenamiento. Siempre hay que tener a mano una botella de agua, y es importante comer frutas y verduras para sentirse lleno de energía. Hay que tener cuidado con la alimentación previa al ejercicio para no sentir el cuerpo pesado.

Marcar objetivos

Cualquier mes es bueno para fijarse metas. Lo importante es ser objetiva y no obsesionarse con los resultados, que se van a ir alcanzando poco a poco. Cada vez que se consiga superar un punto, uno se sentirá realizada y con más fuerza para seguir adelante. Pero hay que tomarse las cosas con calma y tener paciencia. Hay que disfrutar del proceso de volver a la rutina, y cuando uno menos se dé cuenta, se verán los resultados.

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