Rutinas exigentes


Cómo y cuándo ejercitarse si el tiempo es un bien de lujo


Dedicarse tiempo a uno mismo es, quizás, uno de los desafíos más difíciles de la actualidad. Las exigencias laborales, familiares, domésticas y demás hacen que de lo ideal a lo real la distancia parezca casi un abismo. En esta categoría suele quedar para muchos el ejercicio físico: a veces un deseo que parece imposible, otras veces una necesidad que no sabemos cómo resolver.

El cuerpo es el único patrimonio que tenemos y eso va mucho más allá de la estética, y si de un dia con 24 horas no tenes más de media hora para vos es porque te estas queriendo muy poco. Un plan integral de fitness para mejorar la es lo ideal para combatir el sedentarismo en niños, adultos e incluso ancianos.

En este punto es importante recordar que el objetivo a seguir no deberían ser dietas milagrosas sino cambios de hábitos, y siempre el punto de partida debe ser el examen de aptitud física. Este certificado sirve para saber cómo está tu cuerpo si vas a hacer ejercicio y también para conocer la capacidad de tu organismo para soportar el sedentarismo.

Luego habrá que ver las particularidades de cada caso. Los entrenamientos no pueden ser preparados de manera general sino que deben ser sumamente personales: Prescribir la medicación de un paciente es un arte; el ejercicio también. No todos necesitan lo mismo.

Para aquellos cuyo tiempo es acotado, el mejor consejo que se les puede dar es incorporar el ejercicio a las rutinas diarias. Si tenés dos o tres horas para mandar mensajes, tenés que tener media hora para entrenar. Al mismo tiempo, se aconseja convertir en movimiento parte del horario destinado a la comida en el trabajo: en el momento de almuerzo podés caminar, sin exigirte mucho, hacer unas sentadillas o unos push up en un banco.

En tanto, a lo que a actividades post cena se refiere, es vital ejercitarse después de alimentarse. El peor veneno que hay es comer e ir a acostarte, porque el corazón tiene que hacer el cuádruple esfuerzo para digerir. En ese sentido, poder ir y dar dos o tres vueltas a la manzana. Es un buen trabajo cardiovascular y de musculación.

Suscríbete para acceso total!

Disfruta de acceso ilimitado a más de 100 notas sobre belleza, horóscopo, moda y tendencias!

Verificando suscripciónError al verificar, intente de nuevo

Por favor verifique su suscripción

54