Las pesas a la hora de entrenar son ideales para tonificar nuestros brazos y conseguir alcanzar nuestras metas durante el entrenamiento. A menos que estés trabajando con un entrenador personal, entrenar no siempre resulta tan intuitivo como parece, especialmente en el momento de trabajar con el peso. Cada mujer tiene una fuerza y contextura particular, por lo que el peso que cada una soporta será diferente.
Existen algunos consejos para elegir las pesas te servirán para saber si estás trabajando con las adecuadas. Debes comenzar siempre poco a poco e ir aumentando el peso de forma progresiva, aunque es fundamental recordar que las repeticiones con pesas deben ser efectivas, deben molestar y deben representar un reto, si no es así estás eligiendo unas demasiado livianas para ti.
Al elegir las pesas, debes poder realizar el ejercicio a la perfección, completando las repeticiones sin que sea imposible o extremamente dificultoso. A medida que tu cuerpo se vaya acostumbrando a ese nivel, podrás avanzar y levantar mayor peso. Una buena forma es empezar con una pesa ligera para ensayar el ejercicio con el movimiento adecuado y cuando lo controles, pasar a una pesa más pesada.
Debes poder completar tu serie de ejercicios con sus repeticiones de forma efectiva pero sintiendo que el músculo trabaja, de lo contrario ¿cuál es el propósito? Una vez que consigas completar tu serie a un buen ritmo y sin dificultad, notarás que es momento de incrementar el peso y subir un peldaño más.
Recuerda hacerlo gradualmente, de dos en dos o de cinco en cinco kilos, solo así conseguirás tonificar mejor tus brazos sin causarte molestias o una lesión. Ante cualquier duda, consulta a un entrenador que pueda orientarte de forma profesional. Elegir las pesas adecuadas es muy importante para potenciar tu entrenamiento y obtener resultados, por eso mide tu resistencia y no lo dejes al azar.
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