Seguro que alguna vez has tenido la tentación de comprar una bici estática para casa, olvidarte de los horarios del gimnasio y organizarte como te sea más cómodo. Ese momento de hacer deporte en casa, con la ropa que te apetezca, viendo una serie o ese programa de televisión que tanto te gusta, ¿realmente es todo tan bonito como lo pintan?
Analizamos si verdaderamente merece la pena que te compres una bici estática y organices tu rutina fitness sin salir de la comodidad de tu casa.
Merece la pena comprar una bici para casa si…
Si eres una persona constante que no necesita presión para hacer deporte, entonces la bici te ayudará y mucho. Si además te gusta practicarlo en la intimidad de tu hogar y te sientes de maravilla haciéndolo a tu manera, será tu buena compañera de ejercicio.
También te la recomendamos si quieres ahorrarte un dinero al mes -en comparación, el presupuesto se ahorrará de manera sustancial-, y si no te gusta acudir a clases conjuntas o al gimnasio a hacer deporte en grupo. Si además consideras el deporte como una parte más de tu tiempo de relax y desconexión, este ejercicio será perfecto para ti.
No te merecerá la pena adquirir la bicicleta…
Si eres una persona que necesita cierta presión para hacer las cosas, olvídate de comprar la dichosa bici. La dejarás en un rincón más pronto que tarde, y no tardando estará sirviendo de perchero para los abrigos de invierno.
Si necesitas sentir el deber de tener que ir a un lugar a practicar deporte porque lo estás pagando, entonces no te compres la bici, no te rentará nada. Además, si por otro lado eres una persona a la que le gusta trasladarse, hablar, ir progresando y tener compañeros de equipo, la bici no será tu mejor aliada, al menos si es en casa. Es mejor que pienses en acudir a clases grupales con el objetivo de hacer deporte o al gimnasio a tonificar.
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