Sobre tener un estómago plano hay muchas teorías, ejercicios físicos, productos y mitos, pero lo cierto es que hay varios factores que influyen. Tanto la genética como el gasto calórico, los ejercicios específicos, las cremas y las dietas importan a la hora de conseguir ese abdomen.
Lo primero que debemos saber es que los abdominales están ahí, pero la capa de grasa que se forma por encima hace que no se vean. Hay quien hace ejercicios pero no nota los efectos, sin embargo esto hace que los músculos estén más fuertes, aunque la grasa siga ahí. Por eso lo primero que debes hacer es concienciarte para bajar de peso, realizando una dieta equilibrada e hipocalórica, y también hacer ejercicio aeróbico, al menos media hora, para entrar en la zona quema-grasas.
Si estás bajando de peso, notarás que en la zona hay menos volumen, pero ahora hay que definir. Exfoliar la piel y aplicar hidratante evitará la flacidez. Además, hay productos como anticelulíticos y reafirmantes. Otro factor es activar la musculatura del abdomen, para lo cual necesitas realizar varias veces por semana ejercicios específicos.
Todo esto son pautas básicas y generales, que harán asomar tus olvidados abdominales. Evidentemente, dependiendo de tu genética, te resultará más fácil o más difícil, pero lo importante es trabajar de forma constante.
Uno de los mejores trucos que podes tener en cuenta es el de hacer un planning, para no olvidarte de nada, y para que no decaiga tu motivación. También están esas fotos para vos misma del antes y del después. Como sabrás, a la hora de definir tu cuerpo, de adelgazar o de conseguir un objetivo, el componente psicológico es uno de los más importantes, por lo que ponete a pensar y realiza un plan exhaustivo. .
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