La depilación de piernas cada vez se hace más frecuente y diario en mujeres y hombres que además de lucir una apariencia impecable buscan obtener otros beneficios como cuando te aplicas alguna crema hidratante o reafirmante no quede adherida sobre el vello si no que se adentre a los poros de manera más fácil.
Para broncearse resulta mucho más fácil que los rayos solares lleguen más rápido a la piel durante el verano en la playa, además de dar una sensación más descansada y cómoda, así como es más fácil mantener una buena higiene corporal.
Ahora bien, siempre en compañía de la depilación debe estar la exfoliación de la piel para formar una combinación que no debe de separase para que tu piel no tome un tono opaco, si no que tengas la piel más suave y brillante.
Una exfoliación no es solo para aquellas personas que presenten problemas en la piel como foliculitis sino al contrario exfoliar la piel te ayuda a prevenir ese tipo de enfermedades de la piel ya que al retirar las células muertas puede dar paso a una regeneración celular que absorbe más fácilmente todos aquellos nutrientes que tú quieras aportarle.
Asimismo, las cicatrices y manchas van disminuyendo su proporción con el pasar del tiempo tras la realización de las exfoliaciones generando un brillo y flexibilidad en la piel.
Sin duda alguna la exfoliación se debe de convertir en el primer paso de tu rutina para el cuidado de tus piernas, ya que una piel exfoliada se depila mejor al retirar las impurezas, células muertas y cabellos que no sirven y obstruyen los poros.
La exfoliación se puede hacer con un poco de azúcar y crema hidratante en una mezcla que se aplica por toda la pierna con masajes suaves que permitirá que se retiren todo lo que opaca la piel para que cuando ocurra la depilación la piel de tu pierna solo tenga por encima los vellos a retirar y una vez hecho de un aspecto más brilloso y sano.
Como todo proceso la exfoliación necesita de pasos a seguirse para obtener los mejores resultados y no lastimar tu piel.
Una piel bien hidratada siempre se prestará de mejor manera para que le realices cualquier procedimiento y tenga el resultado más óptimo, así que toma mucha agua para el correcto funcionamiento de la piel recuerda que ella está compuesta por el 20% del agua que consumimos.
El momento ideal para realizar la exfoliación será cuando durante o después de la ducha ya que allí tu piel ya estará un poco más húmeda.
Utilizar un mismo exfoliante siempre puede que a la larga ya comience a no hacerte efecto aun cuando en el principio te dejaba los mejores resultados.
Cambiar tu rutina para probar cosas y métodos diferentes siempre es buena idea y así eliminar los errores que cometas al momento de realizar la depilación.
La cantidad de veces que debes exfoliar tu cuerpo por semana depende tu tipo de piel, lo más recomendable es de una a dos veces por semana.
Sin embargo, la piel seca solo debe exfoliarse una vez a la semana, para las pieles grasas dos a tres veces por semana, mientras que las pieles sensibles una vez cada quince días para eliminar los residuos muertos de la piel sin lastimarla.
Los exfoliantes caseros son realizados con elementos naturales que son menos invasivos en la piel si no que al contrario aportan más sus propiedades y nutrientes para que sean absorbidas por la piel.
Para realizar un exfoliante casero los elementos mas utilizados son la miel, avena, aceite de coco o de oliva, azúcar, te negro, café, áloe vera, entre otros.
De la misma manera que cualquier otro exfoliante, los caseros ayudan a eliminar las células muertas para tener una dermis completamente limpia y tonificada en tus piernas.
Así como prevenir el envejecimiento prematuro al permitir una mejor oxigenación en la piel cuando desprende la piel muerta que aún sigue adherida en la superficie y obstruye los poros de tus piernas.
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