Maquíllate en minutos con estos simples pasos

Resalta tu mirada en unos segundos

¿Verdad que el eyeliner es un imprescindible, aunque lleves el mínimo maquillaje? Aprovecha que te haces el delineado y úsalo para aplicarte unas pestañas postizas magnéticas. Solo debes aplicar dos capas de eyeliner en gel y cuando aún esté húmedo, colocar las pestañas encima, y listo. Además, al tener una sola línea de pestañas, son más ligeras y aportan un volumen natural, por lo que resultan perfectas para el día a día.

Da color saludable a tus pómulos

Aplica colorete en la parte alta de tus mejillas. Este simple gesto ayudará a aportar un toque de color en tu rostro y resaltar esta zona de la cara. Eso sí, elige un tono suave para que no destaque en exceso y simplemente te dé esa pincelada rosada y saludable. Además, puedes llevarlo fácilmente en el bolso para retocarlo a lo largo del día.

Aporta color y jugosidad a tus labios

Otro producto que se aplica en cuestión de segundos es un labial, y un nude nos ayudará a lucir una sonrisa cuidada. Úsalo para potenciar tu tono si quieres disimular el poco maquillaje que apliques, aunque si prefieres destacar con unos labios potentes sin invertir mucho tiempo en ello puedes optar por un rojo o un tono subido como un granate.

Marca los puntos de luz de tu rostro

Otra forma fácil y rápida de dar un aspecto cuidado a tu cara es aplicar un poco de iluminador. Ya sea en crema o en polvo, sitúalo en el arco inferior de las cejas para acentuar esta zona, en el hueso del pómulo y sobre el tabique de la nariz para marcarlos. No olvides aplicar un poco justo encima del labio superior, que hará el efecto óptico de un punto de luz aumentando visualmente el labio.

Enmarca tu mirada cuidando las cejas

Al enmarcar la mirada, cuando alguien centra la atención en nuestros ojos, fácilmente desvía la vista a esta zona, así que no te olvides de ellas y defínelas. Primero peina las cejas hacia arriba con el cepillo. Luego, aplica la sombra adecuada con el pincel para rellenarlas y ampliar el arco. Por último, fija la forma y el color con el lápiz. Junto al iluminador aplicado justo debajo, tendrás el marco perfecto para tus ojos.