Cuida tus brochas y limpialas para mejorarán el acabado de tu maquillaje

Las brochas de maquillaje son una herramientas imprescindibles para conseguir que tu maquillaje quede perfecto. Por lo tanto, su limpieza debe ser parte de tu rutina de belleza. Si cuidas tus herramientas como debes, van a durar mucho más tiempo en plena forma y así vas a evitar renovarlas por un largo tiempo.

Además de que te van a hacer lucir una piel más iluminada, radiante, cuidada y bonita, tu rostro te lo agradecerá y te sentirás más linda que nunca. Descubrí el paso a paso para cuidar tus brochas y conviértelo en una rutina semanal:

Paso 1. Limpia

Coloca una pequeña cantidad de shampoo en la palma de tu mano y frota tu brocha contra ella con suaves movimientos circulares.

Paso 2. Aclara

Aclara el pincel con agua tibia y repetí la misma operación hasta que salga totalmente limpia.

Recomendación: Nunca coloques la brocha en vertical con las cerdas hacia arriba al lavarla. La humedad puede llegar hasta el pegamento que las une al mango y se puede estropear.

Paso 3. Seca

Elimina el exceso de humedad con una toalla. A continuación, coloca el mango en una superficie plana. Intenta que la zona de las cerdas no se quede apoyada sobre ella para que no se deforme. Para evitar este problema, podes secar tus herramientas en el canto de una mesa.

Deja que las brochas se sequen de manera natural y nunca uses una fuente de calor sobre ellas. Se deteriorarán antes y perderán las cerdas.

Unas brochas cuidadas prevendrán a tu piel de la aparición de irritaciones, rojeces o granitos. Además, limpiándolas semanalmente los productos se extenderán mejor y conseguirás un maquillaje más preciso.

Aprovecha los días que no te maquilles para limpiar tus brochas. El momento de aplicarte la mascarilla facial o capilar es perfecto para dedicar tiempo a tus pinceles.