Boca tiene todo listo para jugar en Brasil mañana frente al Peixe por la cuarta fecha del torneo más importante de América y sabe bien que será un duelo clave, ya que de ganar quedará bien perfilado para las últimas dos jornadas que serán en La Bombonera ante Barcelona y The Strongest.
En consecuencia, Miguel Ángel Russo guardó todos los soldados el último fin de semana ante Patronato por la Copa de la Liga, para que estén a punto frente al Santos, que viene de salvarse del descenso en el torneo Paulista.
Más allá de la euforia por el Superclásico que se vendrá el próximo domingo por cuartos de final del torneo doméstico, Russo ni se mosquea y sólo tiene la cabeza focalizada en “La Gloria Eterna”.
Por otra parte, Miguel aguarda por las nuevas evaluaciones a Edwin Cardona por su afección cardiológica. También pondrá a prueba a Mauro Zárate, que se recupera de un desgarro, mientras que Esteban Andrada podría retornar al país en cuestión de días si su PCR da negativo.
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