Rafael Nadal no da respiro a sus rivales y es que el mallorquín sigue avanzando en Roland Garros sin tener piedad del que tiene del otro lado de la red. Este viernes, la víctima fue el italiano Stefano Travaglia, quien apenas pudo hilvanar cinco juegos en todo el partido, y a quien el español derrotó por 6-1, 6-4 y 6-0 para meterse en los octavos de final del Major parisino, donde defiende el título por cuarto año consecutivo.
El Matador de Manacor no para de brillar en el polvo de ladrillo francés. Con apenas diecinueve juegos cedidos en los primeros tres encuentros, Nadal ya se instaló en la segunda semana de competencia y es uno de los grandes favoritos a quedarse con el título, una vez más, como ya lo consiguió en doce oportunidades, y en las últimas tres, de manera consecutiva.
Ahora, por un lugar en los cuartos de final, el número dos del mundo y del evento se medirá ante el estadounidense Sebastian Korda, quien proviene de la Qualy, y es el hijo del ex tenista y número dos del planeta, el checo Petr Korda, quien además fue campeón del Abierto de Australia en el año 1998, cuando derrotó al chileno Marcelo Ríos en la definición.
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