Tips para lograr el peso ideal

Baja al mínimo la ingesta de azúcares

Sí, es un consejo muy obvio, uno de los mandamientos en cualquier dieta equilibrada y algo que seguro habrás escuchado miles de veces, pero conviene recordarlo, especialmente si queres perder grasa. Cuando vamos al gym a hacer nuestra rutina de ejercicios, a veces nos damos un gustito dulce, pensando que lo vamos a quemar sin esfuerzo, pero eso es un error. Consumir azúcares hace que, cuando estás entrenando, tu cuerpo queme primero esos azúcares en lugar de quemar las grasas acumuladas. Probablemente no vas a subir kilos, pero tampoco vas a conseguir reducir el nivel de grasa corporal.

Sustituí tus alimentos preferidos por opciones más healthy

Cuanto más estricta sea la dieta que llevas, más difícil será manterla. No elimines por completo los alimentos dulces o muy calóricos de tu día a día, pero reemplazalos por alternativas más saludables. Así vas a poder seguir disfrutando de tus snacks o dulces favoritos, pero vas a reducir considerablemente la cantidad de azúcar.

Si tu debilidad son los hidratos de carbono, no tenes que eliminarlos radicalmente de tus comidas, pero si es recomendable sustituirlos por hidratos de carbono complejos, como arroz integral, pan con harinas no refinadas, pasta de lentejas.

Aumenta la ingesta de proteínas

Las proteínas tienen un papel esencial a la hora de aumentar nuestra masa muscular y tonificar nuestro cuerpo, se trata del complemento perfecto a nuestro entranamiento de fuerza. A la hora de preparar tus comidas, dividí tu plato en tres tercios: 1 de proteínas y 2 de vegetales. Esta proporción te ayudará a perder peso y grasa, y a ganar músculo con los ejercicios adecuados.

Elegí alimentos sanos, que también contengan grasas saludable, como el salmón, pollo, huevos o queso fresco. Evita alimentos ricos en proteínas con alto contenido en grasas saturadas, por ejemplo, los embutidos. También podes incluir en tus platos una fuente de carbohidratos complejos como el arroz integral, quinoa o la papa.

Ajusta tus comidas según tus entrenamientos

Antes de entrenar: comete un snack pequeño y ligero, rico en proteína y combinalo con un porcentaje de carbohidratos, si el entrenamiento va a ser muy exigente. De esta forma, tu cuerpo tendrá la suficiente energía durante el entrenamiento y los aminoácidos necesarios para afrontar el esfuerzo.

Durante el entrenamiento: hidratate durante los ejercicios con mucha agua.

Después del entrenamiento: alrededor de 30 minutos después del entrenamiento, dale a tu cuerpo un aporte de proteínas para una correcta recuperación de los músculos. Si no es hora de comer aún, la mejor opción es tomarte un batido proteico que no contenga ingredientes artificiales.