Consejos para tener sexo en la mesa, sin correr riesgos

Tené en cuenta la altura de la mesa

La altura ideal se acerca a la cintura de la persona que va a realizar la penetración. Si llegados a este punto te preocupa la débil robustez de la mesa, pone los cuatro pies en el suelo para que estén más tranquilos.

Proba fácilmente la resistencia mientras jugas

¿Y si te dedicas a revisar que la mesa aguante el peso mientras están en los preliminares? Simplemente inclínate sobre el mueble y pon ligeramente todo tu peso sobre ella mientras bailas o llevas a cabo algún ritual pre-sexo como un ‘striptease’. Mientras que, de forma disimulada comprobas la estabilidad y que no se vaya a dañar. Una forma elegante de ser precavida sin cortar el momento.

Que tengas sexo en una mesa no significa que esta tenga que ser una superficie dura

Incorpora algo blando para que no vayas a dejar la espalda durante el acto, como por ejemplo una manta acolchada o una toalla. Y si el protector que colocas es absorbente, mucho mejor, así te ahorrarás manchas.

Proba todo tipo de mesas

No te quedes estancada en la típica mesa de salón: existe un universo maravilloso de mesas que también son una opción algo más ‘exótica’. Así, apunta en tu lista una mesa de billar. Opción especialmente buena porque ya de por sí son bastante robustas y tienen una elevación en los bordes para que te dejes caer a gusto sobre el mueble.

Tené muy en cuenta el oral

La mesa te puede ayudar a potenciar el ‘cunnilingus’, ya que al ponerte al borde y subir las piernas tu pareja puede posicionarse mejor sin hacerse daño en el cuello. Incluso podes llevar a cabo la posición denominada ‘el Spiderman’: tu pareja se sienta mirando hacia arriba en la mesa poniendo la cabeza al borde de la misma mientras que vos te sientas sobre su cara de forma comedida sin dejar de estar de pie.

Aprovecha las posturas que una cama no te brinda

Por ejemplo, ponete al borde de la mesa y levanta las piernas para luego cruzarlas en el aire. Deja que te penetren cuando tengas las piernas en forma de X y notarás cómo la fricción de las piernas cerradas ayudará mucho a que alcances el clímax con una estabilidad que no logras en la cama.