Primera cita. Hay nervios, ilusiones y el deseo que esta vez él o ella sean “la” persona esperada para empezar a construir una nueva historia. 

Algunas mujeres invierten horas decidiendo el vestuario, muchos varones se plantean cuál es la escenografía adecuada para la cita. Si los planetas se alinean, puede que nazca el amor. Salvo que se cometa un grave error.

1. Falta de higiene: cualquier amor muere a causa del mal olor. Un reciente estudio de la Universidad de Western Sidney, Australia,  determinó que la falta de aseo y el desaliño son consideradas las principales causas de la muerte del deseo, tanto en relaciones fugaces como en aquellas de larga data.

2. Interrogatorios: una cosa es mostrar interés y otra, muy distinta, es someter al otro a una suerte de indagatoria policial. Lo ideal es que preguntes sin ser indiscreto; escucha más de lo que hables y trata de ser empático. No juzgues.

3. Menciones recurrentes a relaciones pasadas: ni hombres ni mujeres vemos con agrado que nos exhiban el catálogo de conquistas pasadas, relaciones amorosas o sexuales.

4. Conductas descorteses: puede que el encuentro no haya sido justamente como Disney no lo pinto. Pero eso no habilita a la grosería. Sea en una salida romántica o laboral, hay cuestiones de formas que no deben perderse.

5. Alardes: es bueno que te vaya bien con tus cosas, que ganes buen dinero  y seas una persona deseada, sin embargo, eso no te habilita a hacer gala de todos tus logros para tratar de impresionar al otro o, peor aún, para hacerlo sentir menos.