Aumenta la intensidad de los orgasmos y mejora la vida sexual de tu pareja

Es importante prepararnos con todas las estimulaciones preliminares, para ayudar con la lubricación. También son la excusa perfecta para conjugar la ternura, la pasión, las caricias y los besos. Obtendrás muchos beneficios físicos y también un gran acercamiento en pareja.

Juegos preliminares para una noche inolvidable

Al estar en pareja durante cierto tiempo, las relaciones sexuales se convierten en algo más que simple encuentros fugaces y pasionales. Para no entrar en la monotonía y perder la sintonía sensual hacia la pareja, es fundamental agregar juegos previos, para que tus noches se vuelvan más apasionadas.

Vendar los ojos: Es una manera de experimentar con el tacto, déjale que te vaya acariciando lo que decidas acercar a sus manos. Puede recorrer su cuerpo con una pluma, o ponerte guantes, que se sientan diferentes texturas sobre cuerpo. Experimentar todas las sensaciones.

Baile erótico: Ofreceros en pareja un baile sensual o un striptease. Ya verás como se eleva la temperatura.

Masajes sensuales: Utilizando aceites esenciales con aromas afrodisíacos, comenzando por la espalda y acariciando todo el cuerpo, el interior de las piernas o los pies. Dejarse llevar y sentir las manos arrastrándose sobre la piel. Un masaje erótico de lo más excitante.

Juguetes sexuales: Una pieza clave para salir de la rutina. Existen de todo tipo y tamaño para divertirnos juntos. Se pueden usar para aumentar el placer antes, durante o después de la penetración.

Poner esposas: Es una situación muy excitante en la que uno de los dos queda a merced del otro, indefenso, sin poder hacer nada. Puedes usar esposas, pañuelos o tiras para atar sus manos. Ideal para las parejas que disfrutan dominar o ser dominados.

Disfrazarse: Jugar a los disfraces y escenas eróticas con alguna fantasía, situación o profesión. Es un buen momento para ponerlo en práctica.

Sexo oral: Es el juego preliminar por excelencia. Puedes comenzar a estimular a tu pareja y luego la práctica puede ser recíproca. Comienzas a practicar a tu pareja sexo oral a la vez que el estimula tu zona genital, lo que conocemos como el 69. Podéis intercambiar posiciones o posturas para disfrutar ambos de estas prácticas.