Lo que hacemos en la cama y el otro no soporta

Admitámoslo: la mayoría de las veces en que ocupamos nuestro tiempo pensando o hablando sobre las relaciones sexuales y de pareja solemos hacerlo mirando hacia afuera y criticando, normalmente, todas aquellas manías y costumbres que algunos hombres tienen en la cama y que nosotras no soportamos.

Sin embargo, son menores las veces que nos miramos a nosotras mismas y reflexionamos sobre cómo actuamos o cuáles son nuestras pequeñas ‘manías’ en la cama. Llego el momento de hacerlo y, para eso, vamos a resumir cuáles son esos algunos de los errores garrafales que algunas mujeres cometen en lo que al tema sexual se refiere, y que ellos no soportan.

La pasividad y la exageración

Puede que en algunas ocasiones somos algo pasivas. Ellos lo tienen claro: no hay cosa peor que una mujer que se tumba en la cama ‘y se deja hacer’. No se trata de ser una loba agresiva pero sí de encontrar el equilibrio. A veces olvidamos que no estamos solas en la cama. Ni te dejes hacer ni gimas y grites como si el mundo se estuviera acabando. ¡Encontra un punto de equilibrio!

La poca naturalidad

Que sí: seguramente estemos llenas de imperfecciones, pero creenos cuando decimos que, en ese momento, eso es lo que menos les importa. Estar pendientes de nuestra pose más que de disfrutar y de hacer disfrutar, la manía de las luces apagadas, entre otras. Lo mejor es una mujer libre de complejos que apueste por la naturalidad y se centre en lo que ha de centrarse.

El incumplimiento de unos mínimos

Sentimos admitirlo pero sí, hay algunos puntos que debemos cumplir siempre: obviamente, además de la higiene, no nos olvidemos nunca de la ropa interior y de la depilación. No se trata de ir todos los días con nuestra mejor lencería, o de estar cien por cien perfecta, pero sí de desterrar esas bombachas antiestéticas y desgastadas que solo sirven para bajar la líbido y cortar el momento, y de estar prolijas para demostrarles que nos importa.