Muchos creen que si llevas mucho tiempo soltera, podría costarte cada vez más encaminarte de nuevo a una relación formal, pero la realidad es muy diferente a este pensamiento.
Hay varios factores por los que una persona decide estar sola y alejada de las relaciones sentimentales, pero es el tiempo lo que te va cambiando poco a poco.
Estos cambios, desde el punto de vista que los mires, pueden ser algo muy positivo y una gran oportunidad de triunfar en el amor en tu próxima relación romántica.
Si te preguntas por qué ¡Este artículo es para ti!
Cuando tenemos una pareja, nos acostumbramos a ciertas con ella, pasamos de ser un individuo que piensa en su interés a pensar en “nuestros” interés.
Con el pasar del tiempo, la costumbre y los hábitos se hacen cada vez más grandes, es por eso que al terminar la relación, nos afecta profundamente y desequilibra nuestras emociones.
Pero el tiempo solteras no pasa en vano, ya que nos ayuda en varios aspectos de nuestra vida y en el crecimiento personal.
Quizá si le preguntásemos a nuestro “yo” del pasado, antes de nuestra última relación amorosa, nos diría que sus gustos y preferencias serían totalmente distintos a los que pensamos ahora.
Pues el tiempo nos hizo madurar emocionalmente y tenemos mejor interpretación de qué es lo que buscamos en nuestra próxima pareja.
De esta manera, sabremos con mayor certeza si la próxima persona que llegue a nuestras vidas será ese alguien que nos seguirá dando paz mental y emocional.
Cuando decimos: “Estoy acostumbrada a la soledad”, no quiere decir que no queramos tener a nadie a nuestro alrededor, sino que estamos cómodas y felices siendo nosotras mismas sin depender de nadie.
Esta madurez es muy importante para analizar a la siguiente persona que pretenda estar a nuestro lado, ya que sabremos en poco tiempo si será beneficioso o perjudicial para nosotras.
Esa madurez te hace entender que para ser feliz no hay que buscar a nadie más, que compartir con otra persona una relación es algo hermoso pero que tu mundo no gira en torno a él, sino que son una compañía mutua que se apoyan y se quieren.
Es lo mejor de todo, el amor propio llegó en un largo pero fructífero camino de autosuperación y descubrimiento de nosotras mismas.
De querernos por quienes somos y saber que, sin importar lo que pase, nunca estaremos solas, siempre te tendrás a ti misma para levantarte y seguir adelante.
En una relación amorosa podemos entregarnos en cuerpo y alma, pero cuando esta finaliza, sentimos ese vacío y esa sensación del “¿Ahora qué?” por acostumbrarte tanto a convivir con quien ahora es tu ex.
Pero el tiempo soltera te enseñó a ser una mujer fuerte e independiente, capaz de valerte por ti misma en cada aspecto sin depender de nadie más.
Al momento de un nuevo noviazgo, esta independencia será vital para ti, ya que sabrás separar la relación con tu autonomía.
Es válido establecer ciertos límites necesarios y dejar claro de que la relación es de dos, pero que cada uno tiene sus propias visiones y pensamientos.
Esto será sano para ambos, pues disfrutarán mucho el tiempo juntos, pero también tendrán esa oportunidad de admirarse mutuamente por los aspectos que le dan individualidad al otro.
Así que, si has pasado mucho tiempo soltera ¡No tengas miedo! Ya que es muy posible de que tu próxima relación sea todo un éxito gracias a lo aprendido.
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