Los productos de higiene menstrual son indispensables pero no todas tienen acceso a ellos debido a los altos precios.
En las últimas horas se ha gestado un movimiento importante en México en torno al tema de la menstruación digna. Y es que finalmente será promulgada una iniciativa en México que elimine el impuesto sobre el valor añadido (IVA) a productos de higiene menstrual.
Esta medida aplicará para toallas sanitarias, tampones, panti protectores y copas menstruales y obligará a las empresas reducir el precio de dichos artículos.
Esto ha sido impulsado por el movimiento “Menstruación Digna”, un grupo de organizaciones que buscan que mujeres y personas menstruantes tengan acceso a productos de higiene menstrual sin impuestos, al ser indispensables para un proceso fisiológico natural.
El IVA es un impuesto que no distingue quién lo paga y por lo tanto, impone cargos iguales pese a la desigualdad económica y de género.
El objetivo de Menstruación Digna México es ayudar a la economía de las adolescentes y mujeres, especialmente por aquellas que no tienen acceso a las mismas oportunidades de una menstruación higiénica y cómoda.
La diputada Martha Tagle ha sido una de las principales impulsoras de esta iniciativa en el legislativo.
“Muy orgullosa de todo el trabajo y empuje del colectivo Menstruación Digna, que pusieron el tema en el debate público y diseñaron una estrategia para que hoy quede aprobada la reforma a la ley del IVA”, señaló en Twitter.
También la senadora Martha Lucía Mícher, celebró la medida: “México se pone a la altura de otros países del mundo que le han quitado el IVA a los artículos de higiene menstrual. Su eliminación forma parte de un conjunto de medidas que buscan generar mayores condiciones de igualdad entre mujeres y hombres en el sistema fiscal”, dijo.
“Por primera vez en la historia del país, se cuenta con una acción con perspectiva de género en materia tributaria que contribuirá a que las mujeres y personas menstruantes tengan menos obstáculos para gestionar su menstruación de manera digna”, señaló el colectivo Menstruación Digna en un comunicado. Organizaciones como Fundar, la Red Nacional de Refugios y ONEA México se unieron para aplaudir la aprobación del proyecto.
Lo que para algunas parece “cualquier cosa”, para otras implica una decisión crucial sobre el gasto que implica adquirir un producto de higiene menstrual.
Las brechas salariales así como las condiciones educativas adversas en todo el país han provocado que muchas mujeres se encuentren en una situación de mayor vulnerabilidad e injusticia cuando menstrúan.
La menstruación no debería ser un lujo que no podemos pagar. La realidad en México es que las mujeres ganamos menos que los hombres y tenemos muchas menos oportunidades que ellos de mejorar.
Por si fuera poco, estamos atadas al llamado pink tax o “impuesto rosa” que eleva el precio de ciertos productos que son vendidos en versiones “para mujer”, aún cuando tienen la misma funcionalidad que los de “hombres” como son los rastrillos.
Miles de mujeres en situación precaria, no tienen los suficientes ingresos para comprar toallas o tampones desechables que les permitan manejar su periodo menstrual. A su vez, la falta de acceso a la información sigue generando falsas creencias, miedo, asco y rechazo.
Además, hay que entender que la menstruación no es igual para todas por lo que cada una tiene necesidades diferentes en cuanto a qué productos comprar, con qué frecuencia y en qué cantidad.
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