Un precio pequeño
No tendrás que gastarte tus ahorros en un gran banquete. Si simplemente invitas a tus testigos, por muy caro que te salga, nunca será tanto como una fiesta tradicional. Además, si lo hacen los dos solos puede ser la comida o la cena más romántica de toda tu vida. Y a un precio casi regalado si lo comparas con una boda tradicional.
Un recuerdo especial e íntimo para toda la vida
Una boda suele ser un momento de amor y energía para los novios, que se miran enamorados durante días cuando termina el evento en cuestión. Pero si además lo haces solamente con él o ella, ¿qué puede ser más romántico y bonito? Será el recuerdo top en los días de tu vida en la relación de pareja.
Ninguna necesidad de pensar en la organización
Te ahorrarás meses de pensar en las mesas de los invitados, de esperar la confirmación de las personas que vienen, de comprar los detalles de los invitados, de darle vueltas a si hará frío o calor, si les gustará el menú. Solamente serán ustedes dos los invitados al evento, y lo elegirán conforme a su gusto común, ni más ni menos.
Un viaje mucho mayor
Muchos novios tienen que renunciar al viaje de sus sueños porque el dinero se va en pagar el resto de cosas, como la boda. Invertí en el viaje que llevas esperando tanto tiempo con la persona con la que te acabas de casar.
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