Para la mayoría de las mujeres, la menstruación es como un lastre que hay que soportar por el mero hecho de haber nacido mujer. Pero dado que el ciclo menstrual es algo que tenemos en común todas las mujeres durante un período que dura más o menos unos 30 años, deberíamos encontrar la fórmula para vivirla como el milagro de la naturaleza que es.
¿Qué emociones nos afectan durante el ciclo menstrual?
Un 80% de las mujeres presentan variabilidad en el estado de ánimo asociados al ciclo menstrual. Las conclusiones del último estudio realizado para el Women’s Healthcare Institute de California, nos muestran que:
- La irritabilidad y la ansiedad son mayores mientras ovulamos.
- La fatiga, la tristeza y el llanto son mayores durante los primeros días de la menstruación.
- Todas estas emociones disminuyen a medida que el ciclo menstrual avanza.
¿Por qué sucede esto?
A nivel físico, la menstruación es una sobrecarga de trabajo para el cuerpo. Imagina por un momento que estás limpiando la nieve acumulada en la puerta de tu casa, pero que no para de nevar… ¡Sería mucho más difícil mantener la entrada sin nieve! Pues con nuestro cuerpo sucede igual.
Tenemos que acudir a las mil obligaciones diarias, pero con un desgaste sanguíneo considerable y nadie nos ha enseñado cómo nutrirnos mejor, ni a cómo debemos honrar nuestro cuerpo, en vez de ver la menstruación como una pesada carga que todas debemos soportar.
En la actualidad el concepto de empoderamiento de la mujer y su ciclo femenino no es un conocimiento que se pase de generación en generación. Más bien, según la historia de las mujeres de nuestra familia, estaremos predispuestas a enfermar, a encontrarnos peor o a vivir la menstruación como algo negativo o positivo. Sea cual sea tu vivencia, toma nota de algunos consejos que te ayudarán a corto, medio y a largo plazo.
Tips para vivir la menstruación sin altibajos emocionales
- Cuida tu diálogo interno. Cuando estés malhumorada piensa que, gracias a tu inimitable sistema reproductor, eres capaz de hacer milagros como el de perpetuar la especie humana. Aunque ahora no desees tener hijos, hay muchas mujeres que no pueden. Siéntete afortunada por tener la posibilidad que muchas no tienen, porque tú, al menos, podrás escoger. Ser agradecida, pese a las molestias te ayudará.
- Felicita a tu cuerpo por la renovación mensual de tus tejidos uterinos y de la detoxificación que supone para tu cuerpo. Si vives conectada contigo misma te será más fácil entender la maravillosa función que tu cuerpo realiza cada mes. El cuerpo nos pide descanso para conectar con nuestra vida interior y se lo debemos proporcionar, en la medida de lo posible, y sin ninguna culpabilidad. La menstruación nos pide estar en fase con nosotras mismas.
- Es un momento de máxima sensibilidad sexual. Algunas mujeres no quieren ni oír hablar de sexo, pero para otras los orgasmos son mayores, pues el cuerpo tiene mucha más vascularización. Seas de un grupo o de otro vívelo con naturalidad.
- Tu intuición, tu sensibilidad para captar las emociones de los demás y para saber cómo quieres vivir, está en su punto álgido cuando estás ovulando, por eso estamos más irritables, porque soportamos menos nuestros fallos, los de los demás y no podemos callarnos porque nos estamos renovando por dentro y es inevitable que se exprese hacia afuera también.
- Debemos tomar suficiente vitamina B, C, Hierro, Magnesio y Triptófano para equilibrarnos a modo nutricional durante el período.
Si nos sentimos orgullosas, en paz y agradecidas de tener en la menstruación una aliada que nos marca las etapas que debemos vivir, entenderemos que escuchar lo que necesita nuestro cuerpo es la base del respeto que te debes a ti misma. Y ya sabes que como haces una cosa, es como haces todas las cosas, así que empieza hoy por ti y celebra tu universo femenino.
Al final ser consciente de nosotras mismas, nuestro cuerpo y nuestra vida interior es imprescindible para querernos.