Toda chica amante del maquillaje, desea saber la función de cada una de las brochas de maquillaje. ¡Existen cientos de modelos y formas! Pero los más comunes y funcionales, abundan en el kit de toda chica. Si deseas aprender un poco más sobre la función de tus brochas, puedes aprenderlo con nuestros trucos de maquillaje.
¿Te ha pasado que miras tutoriales de maquillaje y ves que la chica tiene cientos de brochas diferentes? Pues, aunque no lo creas, cada una de ellas tienen una función específica. No quiere decir que necesitarás comprar 50 brochas, sino que adquieras las primordiales para que puedas gozar de un maquillaje excelente.
Para comenzar, se recomienda que tengas todas tus brochas ordenadas. No querrás que el material se deteriore al tenerlas mal guardadas o mal ubicadas. Es preferible que las tengas guardadas en un estuche, o en un vaso sin que nada les toque o les doble las cerdas.
Lo más importante de todo, es que sepas la función exacta de cada brocha. Puedes experimentar usandolas para diversas aplicaciones, pero si las usas para su función exacta, obtendrás un resultado pulcro. Visualiza cada una de sus diferencias y separalas según su función.
Es decir, no utilices una misma brocha para aplicar dos tonos diferentes de colores. Si eres fanática del maquillaje de ojos extravagante o lleno de color, deberás adquirir numerosas brochas para que puedas utilizar cada una para un color específico. De lo contrario podrías mezclar los colores sin quererlo.
Que tengas muchas brochas no significa que no debas cuidarlas. Si no las limpias cada vez, las cerdas se van deteriorando cada vez más. Y llegarán a un punto donde las cerdas se saldrán por sí solas, y probablemente termines llena de pelitos por toda la cara al terminar de maquillarte. ¡Y no querrás eso!
Sabemos que hay muchas brochas, de diferentes tamaños y modelos. ¡Pero la verdad es que puedes encontrar muchas brochas con distintos modelos que sirven para una misma cosa! Para no confundirte, lo que tendrás que saber es con qué puedes aplicar mejor cada uno de los productos y qué acabado quieres que tenga.
Las brochas para aplicar base pueden llegar a ser muy diferentes. Como lo habiamos mencionado, todo dependerá del acabado que desees obtener para que elijas la brocha indicada para ti. Los tres tipos de brochas más comunes son: Brocha de lengua de gato, brocha densa redonda o plana, brocha duofibra o mofeta.
De estas brochas también existen diversas formas y tipos, aunque se caracterizan por ser un poco más sueltas y de cerdas más suaves. En este caso se busca dar un leve color a la piel y no llenarla por completo como en el caso de la base. Encontramos la brocha abanico idea para iluminadores, brocha mofeta y pelo suelto recomendada para rubores y polvos.
En este grupo están las más variadas, ya que hay muchas maneras para aplicar un corrector. Puedes hacerlo más grueso, más pronunciado, corregir las cejas, el contorno de la nariz… Y para lograr un acabado ideal necesitarás diferentes tamaños de brochas.
Lo más importante para comenzar un maquillaje, es obtener el mejor acabado posible. Por lo tanto, el modelo de brocha más importante que debes elegir será este. No buscamos que la piel luzca como una pintura al óleo, sino que quede un maquillaje muy natural.
Para aplicar la base, se recomienda el uso de una brocha con cerdas firmes. Pero suaves, ya que al ser muy duras creará zurcos indeseados en el maquillaje. Al aplicar el primer al maquillaje, si la brocha no es la indicada podría mezclar ambas texturas.
La mejor brocha para lograr un acabado ideal, será la brocha lengua de gato. Que es mucho más aplanada, y permite aplicar la base uniformemente por todo el rostro y obtener un acabado perfecto.
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