XL + XL

Sí al equilibrio: skinny con maxi pull o top con pantalón amplio.
Lo que queda demostrado aquí es que dos prendas amplias también pueden estar en sintonía cuando
las texturas son diferentes.

Con cinto

Atrapar un cárdigan con un cinturón es un gesto que adoramos y que trasladamos también a los suéteres clásicos. ¿Las razones? Afina la cintura y levanta el outfit por completo.

Oda a los ’80

Si algo nos dejaron esos años son las hombreras y el corderoy. Nos encanta este género noble por demás (que puede adoptarse también en primavera en su versión más liviana y amplia) y la forma de reloj de arena que logran los hombros destacados.

Nuevas formas

Un suéter irregular suele parecer poco práctico, pero no. Con una camisa por debajo y botas adheridas puede ser un equipo infalible que derrocha onda.

Get the look!

Un dejo de granny style en los accesorios y otro de nostalgia con la falda midi años ’50. Un toque masculino con un blazer oversize más botas seventies… voilà! En el mix está la clave.

El gran moño

Lo vimos asomar tímidamente, en pequeñas dosis: un lazo al cuello cerrado y no mucho más. El diseñador Alexis Mabille siempre alardeó con él y ahora Fendi sigue sus pasos. ¡Nos encanta!

Bucaneras

El súmum de la femineidad.
¿Hay algo más sexy que un suéter como vestido y bucaneras?

A puro color

El diseñador nipón Issey Miyake nos tiene acostumbradas a tratar los géneros y los colores con maestría. Desde el origami hasta la paleta, sabe hermanar los tonos como nadie.

El toque disco

Una buena manera de animarse a la mini de vinilo es combinarla con un suéter y botas en total black. Poco make-up y mucha actitud para llevar las 24 horas una prenda que parecía imposible.

Botas por fuera

Relegadas a los slim fit, se llevan ahora de maravillas con los pantalones amplios. El look campo con algunos accesorios western son un acierto por donde se lo mire.