El estilo que llevamos por fuera puede conseguir que cambiemos de estado anímico, y es una realidad. Muchas personas no dan importancia a su exterior, pero otras sí y puede ser una buena herramienta para conseguir levantar el estado en el que nos encontramos.
Por eso a la pregunta: ¿puede un cambio de look físico cambiar la manera en la que nos sentimos? La respuesta rotunda es sí. Y si queres que eso te suceda no te pierdas estos consejos.
Un corte de pelo y un cambio de color
Nuestra melena, sea larga o corta puede ser nuestro sello de identidad, toda una seña de lo que verdaderamente nos gusta y nos representa. Por eso un cambio de look en condiciones que se note y nos haga venirnos arriba pasa siempre -o casi siempre- por el pelo.
Te recomendamos que hagas algo extremo, pero con cabeza. No pases de la melena XXL al pixie porque podría ser un poco exagerado. Pero, ¿por qué no hacerlo poco a poco? Un buen corte de pelo, o unas extensiones si no lo tienes muy largo.
También podes hacer un cambio de color, como unas mechas. Podes usar tinturas temporales para probar ese color que siempre quisiste tener pero que nunca te animaste. Este es el momento para ver si te gusta como te queda, ya que igual con el correr de los días se ira decolorando.
Algo temporal: ¡uñas de fantasía!
Una de las mejores maneras de conseguir un cambio de animo es con algo simple -y además, fácilmente reversible- hacerte unas uñas de fantasía. Podes encargarte de ello vos misma en casa con ayuda de un esmalte muy colorido y un top de purpurina.
Además, si queres decorarlas con puntitos por ejemplo podes hacerlo con otro pintauñas y un palillo que se utiliza para los dientes. Solamente te hace falta tiempo y maña.
Un maquillaje más profundo o la ausencia de maquillaje
Ambas cosas pueden ser el toque que te falta para subir tu ánimo y tu autoestima. ¿Por qué no probarlas?
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