Las rutinas de limpieza facial proporcionan grandes beneficios a tu piel. Busca un momento cada día y dale a tu piel esos mimos que tanto necesita. Consigue una piel bonita y radiante con los siguientes pasos:
Paso 1: Limpieza de la piel
Lávate la cara con agua tibia y jabón neutro. Eliminarás la suciedad y la grasa de la piel. Después del enjabonado, utiliza un disco de algodón mojado en agua micelar o el producto limpiador que uses. Pásalo alrededor del rostro y el cuello. De esta manera, eliminarás los restos de maquillaje que quedasen, suciedad e impurezas mientras que tu piel se encuentra fresca y calmada recuperando toda su luminosidad.
Paso 2: Multimasking
El multimasking es la aplicación de distintas mascarillas según las necesidades de cada zona de la cara. En la frente puedes aplicar una mascarilla purificante para controlar brillos e imperfecciones. En los pómulos, una mascarilla con carbón, que tiene efecto détox e ilumina. Finalmente, en la nariz y la barbilla, minimiza los poros a través de alguna mascarilla exfoliante.
Déjalas actuar unos quince minutos y aclara con abundante agua haciendo movimientos circulares para exfoliar mientras la retiras. Con el uso de las mascarillas eliminarás grasa, impurezas, poros abiertos, exceso de sebo, puntos negros y brillos.
Paso 3: Rutina hidratante
Finaliza tu sesión de cuidados con una rutina de belleza hidratante. Utiliza contorno de ojos y crema de día y de noche para proporcionar a tu cutis una capa de hidratación y suavidad.
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