Bayern Münich y Lyon, se enfrentan en la segunda semifinal de la UEFA Champions League para definir quien será el próximo clasificado a la final de Lisboa. Los bávaros, se imponen por 2-0 casi sin merecerlo y la única diferencia entre ambos es la efectividad al momento de definir.
El encuentro comenzó con un Bayern Münich dormido, casi desconocido en comparación con lo hecho en el último partido contra el Barcelona. De hecho, el Lyon comenzó a imponerse con sus delanteros por los costas y comenzaba a generar claras situaciones pero la falta de efectividad le jugaba en contra.
Esto, fue aprovechado por los alemanes quien luego de que Ekambi estrellara una pelota en el palo, se pusieron en ventaja en el marcador. A los 18 minutos, Gnabry agarró el balón en la derecha y luego de eludir rivales, sacó un zurdazo que ingresó en el ángulo izquierdo.
A los pocos minutos y ya con el partido más controlado, el Bayern lograba desequilibrar por los costados y esa fue la clave, un desborde y un centro al medio. Lewandowski erró el centro bajo el arco y por atrás volvió a aparecer Gnabry para marcar el 2-0 final en los primeros 45 minutos.
En el complemento, los alemanes continuaron controlando el juego sin mayores sobresaltos, pero con muy pocas llegadas clara. De hecho, todo indicaba que el marcador iba a quedar estable ya que la intensidad del partido bajó de manera notable. Hasta que cerca del final del encuentro, Lewandowski saltó dentro del área más que el resto y anotó el 3-0 final.
Con este resultado, el Bayern Münich jugara una nueva final de Champions League para poder conseguir la sexta orejona frente a un PSG que jugará su primera final en la historia del club. Sin dudas un duelo de estilos, pero dos equipos con estrellas y juego en equipo.
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