Después del cimbronazo con Belgrano, el DT pone sobre la mesa la posibilidad de desarmar la dupla ofensiva Merentiel-Giménez e incorporar un volante para potenciar el funcionamiento.

Salvo en contadas excepciones, como por ejemplo la goleada a Newell´s, resulta díficil decir que a Boca le ha funcionado el doble “9” en la tercera etapa de Miguel Ángel Russo como entrenador, ahora a cargo de Claudio Úbeda. Pero, esa insistencia con pocos resultados, parece haber llegado a su punto límite tras el cimbronazo contra Belgrano: el DT baraja disolver la dupla Miguel Merentiel-Milton Giménez. Más concretamente, está “en revisión”.

El Xeneize retomó el trabajo en el predio luego del 1-2 en La Bombonera que lo dejó fuera de los ocho primeros del Torneo Clausura y también de la zona de clasificación a la Copa Libertadores 2026. Con ese panorama complicado y la mente en el partido postergado ante Barracas Central (el próximo lunes), en Ezeiza se plantean romper el esquema que venía utilizando e implementar otra variante táctica.

El plan de Úbeda es probar a lo largo de la semana un equipo que tenga un solo delantero central, en principio Merentiel, y un volante más, con el objetivo de potenciar el juego asociado y darle un funcionamiento más aceitado a Boca.

El doble 9, pese al poderío ofensivo que puede significar en los papeles, le viene aportando un bajo porcentaje de gol al Xeneize y por eso surge la chance concreta de desarmarlo. En la era de Russo y Úbeda ya van 11 partidos en los que la formación sale con dos atacantes de referencia y los involcurados apenas convirtieron siete goles: tres Giménez, dos Merentiel y dos Cavani. Sin ir más lejos, el goleador de Boca en este ciclo es Rodrigo Battaglia.

¿Está confirmado el cambio de esquema? No, es una posibilidad que evalúa el cuerpo técnico y que verá si en las prácticas le trae los frutos esperados. El ensayo clave y determinante será el viernes en La Bombonera, pero a esta hora es factible que Giménez salga del once e ingrese un mediocampista.

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