El Apache comunicó lo anunciado, que no seguirá jugando en Boca Juniors. El símbolo azul y oro se lo dijo a los hinchas de Boca sin filtros y con mucha emoción. “No tengo más nada para nada. Lo di todo como jugador y por eso es que estoy feliz. Boca siempre me necesitó al 120 por ciento y no estoy mentalmente preparado para eso”, expresó.
Posteriormente, Carlitos expresó que no hubo razones extradeportivas en su decisión. “Boca es el mejor club del mundo. Mi papá era de Boca, mis hermanos, mi mamá, mi mujer y mis hijos. No puedo mentirle a ellos y a los hinchas, por eso no puedo mentirle a los hinchas y la decisión es pura y exclusivamente mía”, soltó.
Con lágrimas y con la voz cortada, el diez explicó que los últimos meses fueron cuesta arriba debido a la exigencia del Mundo Boca. “No tuve tiempo de hacer el duelo de mi padre ni llorarlo. A la semana ya estaba jugando y no es normal. Necesito estar con mi mamá y ser hijo”, confesó.
Por otra parte, Tévez comentó que necesitaba poner un freno, ya que no se encontraba al cien por ciento como lo exige el Xeneize. “Mucha gente me pedía que me quede hasta diciembre y aguante a que la gente que vuelva a la cancha y que eso me iba a llenar. Eso era lo que querían ellos y se me hizo muy difícil”, argumentó.
Finalmente, el capitán eligió quedarse con su última mejor imagen en La Bombonera: “Mi mayor alegría y satisfacción fue recordar la última vez que nos vimos, donde la gente gritaba como loca ‘dale campeón’ y la última ovación a Maradona en una cancha y la última vez que mi viejo me vio jugar a la pelota y llorar de alegría”.
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