Su llegada a comienzos del año parecía solucionar el problema de Boca en el arco, tras la salida de Sergio Romero (quien continúa en el club y en las últimas horas rompió el silencio después de mucho tiempo). Sin embargo, Agustín Marchesín no ha mostrado la solidez que se esperaba y, tras varios altibajos, quedó en la mira tras la derrota ante Defensa y Justicia, cuando hasta el propio Leandro Paredes le recriminó un error delante de todos.
Ya antes de la caída en Florencio Varela, si bien no abundaban los cuestionamientos al ex-Lanús, sí empezó a instalarse si era necesario que el Xeneize buscara un arquero para 2026. Su actuación el último sábado no lo ayudó, pero el cuerpo técnico de Miguel Ángel Russo tiene decidido que hasta fin de año seguirá siendo titular.
Lo cierto es que Marchesín es uno de los líderes del vestuario, junto al mediocampista campeón del mundo y a Edinson Cavani, y, si bien viene de un año irregular, hay confianza en que finalmente se asiente en el puesto. Por ahora, y en un escenario poco habitual por la incertidumbre que genera el estado de salud del DT, no hay planes para salir a buscarle un reemplazante en el mercado de cara al año que viene.
Más allá de su nivel, algunos hinchas no se olvidan de aquel pedido de cambio en la previa a los penales ante Alianza Lima, por la Fase 2 de la Libertadores. Leandro Brey fue su reemplazante, pero no pudo contener ningún remate y Boca se quedó sin participar de la Copa por segundo año consecutivo.
Es justamente el pibe de 23 años el primer suplente de Marchesín. De gran futuro y con varias actuaciones destacadas en su haber, su cierre de 2024 no fue el deseado y cuando le tocó jugar ante Rosario Central por la 8ª fecha del Torneo Clausura, fue responsable directo del gol olímpico de Ángel di María. Igualmente, la evaluación de su actuación esa tarde terminó siendo positiva.
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