Con el trabajado 2-1 ante Sportivo Trinidense por la Copa Sudamericana ya consumado, el entrenador de Boca, Diego Martínez, aseguró que era necesario para su equipo dar “una muestra de personalidad y carácter” después de la eliminación en semifinales de la Copa Liga Profesional. Al mismo tiempo, celebró que los tres puntos volvieron a dejar la clasificación a la siguiente fase en manos de sus jugadores.
“Valoro que más allá de estar abajo en el marcador, los muchachos siguieron intentando y la victoria llegó de manera agónica. Para nosotros era muy importante, después de la eliminación en la Copa de la Liga, dar una muestra de carácter y personalidad. Ahora, la clasificación vuelve a estar en nuestras manos y dependerá de nosotros poder clasificarnos primeros para evitarnos una fase”, sostuvo el DT en la conferencia de prensa posterior al partido en Paraguay.
Con respecto al juego en sí, Martínez remarcó que el estado del campo de juego no era el ideal, pero al mismo tiempo sostuvo que sus dirigidos estuvieron demasiado imprecisos: “Más allá del estado de la cancha, estuvimos imprecisos, fundamentalmente varios jugadores que para nosotros son muy importantes. En nuestras imprecisiones tuvieron que ver el campo de juego y nuestro rival, que hizo muy bien su trabajo, que achica los espacios y que nos hizo atacar en espacios muy reducidos”.
De esta manera, con dos fechas por delante -en ambas el Xeneize jugará en La Bombonera-, Boca dependerá exclusivamente de lo que pueda hacer. Para asegurarse el primer lugar debe ganar los dos partidos que le quedan. Con eso llegará a 13 unidades. En cambio, si empata con Fortaleza y luego vence a Nacional en su casa, ya tendrá que sacar la calculadora y esperar a lo que hagan los dirigidos por Juan Pablo Vojvoda en la última jornada en la que recibirán a Trinidense.
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