El tiempo pasa y la proeza de Boca en tierras asiáticas se hace cada vez más grande. Es que desde aquella final Intercontinental ante el Rossonero en 2003 hasta hoy, ningún club argentino logró subirse a la cima mundial a nivel de clubes.
Aquel 14 de diciembre, el equipo de Carlos Bianchi fue a Yokohama a hacer pata ancha y vulneró al Milan de Shevchenko, Kaká, Pirlo, Inzaghi, Maldini, entre otros. El partido fue a alargue y penales luego de un 1-1 ajustado con tantos de Tomasson para los italianos y Matías Donnet para el azul y oro.
En la definición por penales, el Pato Abbondanzieri fue el gran héroe de Boca. El arquero le contuvo los disparos a Pirlo y Costacurta, mientras que Seedorf la tiró por encima del travesaño. En tanto, los argentinos fueron efectivos a excepción de Sebastián Battaglia; se lo atajó Dida. El último shoot fue de Cascini: gol y a festejar el título mundial.
¿El equipo de aquella jornada? Abbondanzieri; Perea, Schiavi, Burdisso, Rodríguez; Cascini, Battaglia, Cagna, Donnet; Iarley y Barros Schelotto.
Desde la vuelta olímpica del Xeneize hasta hoy, pocos argentinos tuvieron la chance de consagrarse campeones mundiales pero no pudieron. En 2009, Estudiantes cayó ante Barcelona, en 2014, San Lorenzo no pudo frente a Real Madrd, en 2015 River fue goleado por el Culé y en 2018 el Millo jugó pero no logró meterse en la final.
Boca, el último argentino campeón del mundo a nivel clubes
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