Todavía con algunas dudas, el DT terminará de confirmar la formación para jugar en Avellaneda en la práctica matutina de este viernes.

Se viene un viernes clave en Boca de cara a lo que será el clásico con Racing en Avellaneda. Tras la práctica de ayer en la que mezcló y no dio señales, se espera que en el último entrenamiento de la semana Diego Martínez ya plasme en el predio de Ezeiza el once que tiene en mente para saltar al Cilindro el sábado a las 17, en el marco de la fecha 14 de la Liga Profesional.

Con los jugadores convocados a las Eliminatorias Sudamericanas a disposición salvo el caso especial de Luis Advíncula, quien volvió a recaer en la inflamación del tendón de Aquiles que lo había tenido a maltraer en su momento y por lo tanto no fue convocado, la idea del entrenador es mantener a la base de los que vienen de jugar en Córdoba contra Talleres.

A la vuelta de Miguel Merentiel por el lesionado Brian Aguirre hay que sumarle la posibilidad concreta de que Sergio Romero recupere su lugar en el arco en lugar de Leandro Brey, héroe en los penales en la Copa Argentina, tras superar una dolencia en el hombro. Al mismo tiempo, tampoco hay que descartar otra reaparición: la de Marcos Rojo, aunque en su caso podría sumar algunos minutos ingresando en el complemento para así llegar con ritmo al Superclásico.

Lo que sí es un hecho es que Boca deberá seguir esperando por Edinson Cavani. Aún en vías de recuperación del desgarro en el sóleo, Martínez no quiere arriesgar a su estrella ante Racing con el objetivo de que pueda ser titular ante River y por eso ni siquiera lo inscribió en la lista de concentrados.