
Cuando vivía su mejor momento en Boca, con continuidad y un nivel propio de su jerarquía internacional, un nuevo revés físico sacudió a Ander Herrera en la previa de los cuartos de final. Aunque internamente pusieron paños fríos y no quisieron avivar el avispero, lo cierto es que el vasco llegó al partido con Argentinos Juniors con una molestia muscular que le impidió jugar pese a que fue convocado.
De ahí parte la explicación sobre su nula participación en un partido que, como los últimos en los que ingresó y mejoró considerablemente al equipo, pedía que esté en la cancha para recuperar la pelota y manejar los tiempos ante un rival que monopolizó la tenencia.
Por eso, considerando que Herrera no estaba al ciento por ciento por un problema en el isquiotibial que sufrió a mediados de la semana anterior y le impidió hacer fútbol, Claudio Úbeda se inclinó por Tomás Belmonte para reforzar el mediocampo cuando Argentinos se le venía con de todo a Boca.

Ahora, la preocupación tiene que ver con su evolución de cara a las semifinales, ya sea ante Racing o Tigre. El Xeneize recién retomará las práctica el martes, en el turno vespertino, y todo indica que el volante de 36 años trabajará de manera diferenciada para intentar recuperarse de lo que por ahora no se informó como una lesión, pero se sabe que le impide estar óptimo.
Herrera conoce muy bien su físico y por eso bajó la intensidad en los últimos días, tanto que aunque fue citado no iba a jugar frente al Bicho. Será un día a día hasta el próximo fin de semana, aunque hay que decir que a esta hora la información es que difícilmente logre estar en su mejor versión para las semifinales que afrontará Boca.
Disfruta de acceso ilimitado entre más de 100 juegos de deporte, estrategia, acción y más.
Suscribirme