La selección nacional se encuentra en un momento de recambio, pero las estadísticas dan que pensar

Argentina ayer empató 1 a 1 contra Paraguay, y si bien en el segundo tiempo pareció ser superior al equipo de Berizzo, su juego no fue convincente. Y esto último viene pasando muy seguido en los partidos por eliminatorias que tiene la albiceleste.

Sosteniéndonos solamente en los partidos disputados por eliminatorias sudamericanas, desde el arranque del camino a Rusia hasta hoy en día. La selección Argentina solamente logró convertir 23 goles en 21 partidos jugados. Solo Bolivia y Venezuela marcaron menos en la misma cantidad de partidos, Brasil es quien más convirtió (50 en 20).

En 7 partidos de esos 21 no anotó ningún gol (33,33% de los partidos jugados). Además como local lleva 11 en 11 encuentros, y de esos goles convertidos 5 fueron en dos partidos (2-0 a Bolivia y 3-0 a Colombia) casi el 50%. Del global de goles (23), 8 los hizo Messi, 3 de penal, 1 de tiro libre, 1 favorecido por un desvío en un rival y los 3 de jugada ante Ecuador. El resto se reparte entre Di María, Pratto y Mercado (2); Lavezzi, González, Higuaín, Biglia, Otamendi, F. Mori, Lautaro, Correa, Feltscher en contra (1).

Pero los más alarmante se da a la hora de ver la cantidad de puntos que Argentina obtuvo en esos partidos. Como local cosechó apenas 19 de los últimos 33 puntos en juego, y como visitante obtuvo 16 de los últimos 30. Es decir que en global la Argentina rescató 35 puntos de 63 posible en los últimos 21 partidos de eliminatorias, por su lado Brasil obtuvo 47 de 60.

Desde que comenzaron las eliminatorias a Rusia 2018, por el banco de la selección pasaron 4 técnicos distintos (Martino, Bauza, Sampaoli y Scaloni). Han cambiado entrenadores, dibujos e intérpretes, pero Argentina, en Eliminatorias, arrastra un problema de relación con el gol que también se vincula con la cantidad y la calidad de sus chances.

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