Schwartzman tuvo un día errático en la Gran Manzana que aprovechó perfectamente el holandés Van de Zandschulp para meterse en cuartos de final.

No pudo ser para el argentino Diego Schwartzman en los octavos de final del Abierto de los Estados Unidos. Es que el Peque, que venía teniendo un andar demoledor en las primeras ruedas de la competencia neoyorquina, tuvo un mal día este domingo ante el holandés Botic Van de Zandschulp, quien lo aprovechó y se metió en los cuartos de final de un Grand Slam por primera vez en su carrera.

El jugador surgido de la Clasificación venció al argentino, undécimo favorito, por 6-3, 6-4, 5-7, 5-7 y 6-1, en un match atípico para el Peque y perfecto para el de los Países Bajos. Justamente, en la ronda previa, también había derrotado a un argentino, Facundo Bagnis, en cuatro sets, y ahora sacó de la competencia a uno de los mejores tenistas que tenía el cuadro masculino aún en carrera.

De esta forma, el sueño de Nueva York quedará trunco para el Peque. Van de Zandschulp, por su parte, se metió por primera vez entre los mejores ocho de un Major y buscará un lugar en las semifinales cuando se mida el próximo martes ante el ruso Daniil Medvedev, segundo favorito, vencedor de Daniel Evans en los octavos de final, en sets corridos.