El serbio perdía dos sets a cero pero reaccionó a tiempo y remontó un partido que parecía imposible. Nole, además, se vio beneficiado por una fatiga de su rival, que lo obligó a retirarse antes de terminar el match.

Novak Djokovic tuvo un lunes gris en París, aunque terminó resolviendo a su favor, para así meterse en los cuartos de final de Roland Garros. El serbio, número uno del mundo, se impuso a Lorenzo Musetti por 6-7 (9), 6-7 (7), 6-1, 6-0, 4-0 y retiro y así se aseguró un lugar entre los ocho mejores de París, ciudad donde defiende la final alcanzada la pasada temporada.

Nole, quien venía de imponerse claramente en sus primeras tres rondas, comenzó dubitativo ante el italiano Musetti. El joven jugador sorprendió a todos los presentes al hacerse con los dos primeros parciales en tie-breaks ajustadísimos y prendió la alarma en el banco de Djokovic.

Sin embargo, desde ese tercer parcial, la solvencia por parte del líder del ranking mundial y las dolencias físicas y la fatiga muscular del italiano generaron un combo perfecto para que el encuentro se incline definitivamente para el lado de Djokovic, quien se adueñó de esa manga, la cuarta y cuando se imponía 4-0 en la definitiva, Musseti decidió retirarse.

De esta manera, el serbio quedó a tan solo dos pasos de defender la final alcanzada la pasada temporada en el evento parisino. Primero, en los cuartos de final, deberá vencer a otro italiano, el nueve del mundo, Matteo Berrettini y, en el caso de ganar ese match, deberá volver a hacerse con un triunfo ante el vencedor del enfrentamiento entre Rafael Nadal y Diego Schwartzman, quienes van por el mismo lado del cuadro que el balcánico.