En una entrevista con el medio RTS, el suizo puso sus dudas sobre la mesa con respecto a la realización de los eventos en Cincinnati y Nueva York, en el comienzo del profesionalismo tras el parate de marzo.

Las bombas en cuanto a declaraciones suelen ser moneda corriente en el mundo del tenis durante la pandemia por el COVID-19 que se dio en el mundo y uno de los que arremetió con todo durante estos días fue el ex número tres del planeta y campeón de tres títulos de Grand Slam, el suizo Stanislas Wawrinka, quien puso en duda el regreso del Tour de la ATP en los torneos de Cincinnati y Nueva York.

Campeón del US Open en el 2016, Wawrinka no tuvo inconvenientes en decir que veía complicado el regreso del tenis en territorio estadounidense y dio sus motivos de por qué no viajó al país del Norte de América a jugar los eventos programados en la vuelta de las grandes competencias en el mundo del tenis. “Aún hay muchísimas preguntas y dudas sobre la celebración del US Open. No quiero viajar a Estados Unidos en estas condiciones. Actualmente en Nueva York las cosas están muy mal a causa del Coronavirus y no voy a exponerme. Además, la gira de torneos que vendrá después en Europa será muy dura y por tanto hay que prepararse muy bien y evitar no congestionar mucho el calendario.” enfatizó el helvético, quien, de esta forma, da por hecho que Europa y el polvo de ladrillo serán sus escenarios predilectos para este retorno.

Wawrinka, quien este año disputó el Abierto de Australia y cayó ante Alexander Zverev en los cuartos de final, en lo que fue su mejor participación de todo el 2020, apostará así todo a la tierra batida, su superficie predilecta. “Decidí inscribirme en dos torneos Challengers en la República Checa con la finalidad de ir cogiendo ritmo competitivo antes de los grandes torneos de tierra que tendrán lugar en Roma y París”, aseguró para finalizar.