Por trascendencia, resultado y circunstancias propias, el match decisivo del primer Grand Slam de la temporada fue, sin dudas, el mejor encuentro de esta temporada.

“Dos hombres, una red, y miles de interacciones”, subrayó alguna vez un fanático del deporte y, sobre todo, del tenis, y la frase caló hondo en los especialistas, que determinaron que el juego del deporte blanco era justamente eso. Y si vamos a encuentros épicos dentro de ese juego, el de la final del Abierto de Australia entre Novak Djokovic y Dominic Thiem, durante este año, es imposible de evitar y de recordar como uno de los mejores de los últimos tiempos.

El score marcó un resultado final favorable para Nole de 6-4, 4-6, 2-6, 6-3 y 6-4, para así conquistar su título número diecisiete de Grand Slam, quedando a tan solo dos de igualar a Rafael Nadal y a tres de alcanzar a Roger Federer, en la categoría de máximos ganadores de títulos Majors.

No obstante, lo importante de la final de esta temporada en Melbourne es la capacidad con la que el serbio dio vuelta un encuentro que tenía prácticamente perdido ante el austriaco Thiem, quien disputaba su primera final en el certamen y quien sostuvo serias chances de quedarse con la corona australiana, sobre todo luego de estar dos sets a uno en el marcador de la definición.

Lo cierto es que el match marca, sin dudas, lo que es el mejor encuentro de la temporada 2020 hasta el momento y, sin dudas, quedará dentro de los más grandes por mucho tiempo debido a los factores que se involucran en el mismo, pero, por sobre todas las cosas, por el resurgir de un campeón cuando está ante las cuerdas en un momento casi de knock-out, para hacer un paralelismo con el boxeo.

Aquí, les dejamos las mejores imágenes del encuentro que le dio a Nole su título número ocho en Australia: