El Grand Slam de polvo de ladrillo, que cambió su fecha original para septiembre, tomó la iniciativa por el Coronavirus y no poder garantizar al cinto por ciento la realización de la competencia.

El problema del COVID-19 lleva a los torneos por el mundo a tener que relegar sus actividades o mismo a suspenderlas y uno de los casos más resonantes fue Roland Garros, quien se adelantó antes que la ATP vaya decidiendo cuestiones con respecto al calendario y pasó su fecha de mayo para septiembre.

No obstante, este jueves el Grand Slam de polvo de ladrillo volvió a ser noticia en el mundo del tenis, ya que dio a conocer que comenzará a reembolsar a sus aficionados que habían comprado el ticket para la edición de esta temporada y la razón es lógica, ya que no pueden asegurar la realización de la misma en este año.

De esta manera, el Mundial del polvo de ladrillo pone en duda la realización de la competencia en el mes de septiembre y el calendario de la ATP y WTA tendrá que tener esto en cuenta para lo que queda de sus respectivas temporadas, por si el Coronavirus permite la competitividad en los últimos meses de este 2020.